El dólar cayó luego de que tocó su nivel más alto en dos años, debido a que débiles datos económicos y la amenaza de repercusiones económicas por la guerra comercial entre Estados Unidos y China elevaron las expectativas de un recorte de tasas de interés este año.
El índice dólar, que mide el desempeño de la moneda estadounidense contra seis divisas, borró las ganancias que había anotado previamente en el día y cerró con una baja de un 0,16% a 97,885. La caída del dólar impulsó al euro, que subió un 0,22% a 1,118 dólares.
Las ventas de nuevas viviendas unifamiliares en Estados Unidos cayeron en abril desde cerca de un máximo de 11 años y medio por una recuperación de los precios, mientras que la actividad manufacturera se desaceleró en mayo a su menor nivel en casi una década, lo que apunta a una ralentización de la economía.
Parte de la pérdida de impulso es resultado de la escalada en la guerra comercial entre Estados Unidos y China, que economistas dicen está minando la confianza de las empresas, así como de un débil crecimiento en el extranjero.
Las expectativas del mercado de que la Reserva Federal recorte sus tasas de interés aumentaron el jueves, según la herramienta FedWatch de CME Group. Sólo un 36,2% espera que las tasas se mantengan en los niveles actuales en octubre, una baja respecto al 50,8% de ayer.
La preocupación por las manufacturas de Alemania, el impacto de la guerra comercial en las economías asiáticas y la preocupación por el Brexit y las elecciones parlamentarias europeas han frenado el apetito por el riesgo y han enviado a los inversores a los activos que se perciben como refugio.
Las acciones cayeron en Wall Street y monedas consideradas refugio seguro como el yen japonés y el franco suizo subieron, un 0,72% y un 0,64% respectivamente.
La incertidumbre sobre el Brexit hizo caer a la libra esterlina por decimocuarto día consecutivo frente al euro, su peor racha negativa en los 20 años de historia de la moneda del bloque.