Bruselas, Bélgica.- La Comisión Europea ofreció asumir el costo de acoger a los inmigrantes llegados por el Mediterráneo, tratando de repartir la carga entre más gobiernos después que Italia cerró los puertos del país para las embarcaciones de rescate.
Según el plan, el presupuesto común de la Unión pagaría 6 mil euros por cada persona aceptada, además de financiar el costo de los cientos de expertos que ayudarían a tramitar las solicitudes de asilo de los inmigrantes, procedentes principalmente de África.
El plan de la Comisión, que se prevé que los enviados de la UE aborden la propuesta el miércoles 25 de julio, pretende que los gobiernos de la UE levanten los llamados “centros controlados” en su territorio,se deriva de la cumbre de líderes europeos de junio, que proclamó su éxito por llegar a un acuerdo para controlar la inmigración pero dejó muchos detalles en el aire.

La inmigración irregular ha disminuido considerablemente desde 2015, cuando más de un millón de personas entraron en la UE, pero los sondeos demuestran que sigue siendo una importante preocupación para muchos de los 500 millones de ciudadanos de la UE.
Los gobiernos de Italia y Alemania están bajo una fuerte presión para garantizar la entrada de menos inmigrantes en su territorio desde el otro lado del Mediterráneo, mientras que los líderes de Europa del Este se niegan a acogerlos. Italia ha cerrado sus puertos a barcos de rescate humanitario, diciendo que soporta una carga injusta de solicitantes de asilo.
Haciendo públicas sus propuestas, una portavoz de la Comisión dijo que se buscaba “una responsabilidad regional verdaderamente compartida para responder a los complejos desafíos de la migración”, aunque los gobiernos aún no se han ofrecido para albergar nuevos centros.
España, Francia y Malta podrían ser los mayores beneficiarios, ya que han estado acogiendo barcos rechazados por el ministro italiano del Interior, el ultra derechista Matteo Salvini.

Italia y Malta rechazaron un barco con 60 inmigrantes abordo a principios de este mes, obligándolo a atracar en Barcelona, en un reciente ejemplo de divisiones europeas sobre el tema. La Comisión propuso iniciar una fase piloto lo antes posible y dijo que un “centro controlado” para inmigrantes podría emplear a cientos de personas, desde intérpretes hasta expertos en asilo, todo pagado por la UE.
La instalación permitiría una selección rápida de los inmigrantes, enviando de vuelta a sus países a los que no reúnan los requisitos para el asilo, dijo la Comisión. También evitaría que los inmigrantes eludieran la normativa de registro y se dirigieran directamente a los destinos más codiciados, como Alemania y Suecia.
Paralelamente, la Comisión presentó una propuesta de"plataformas regionales de desembarco” que probablemente se situarían fuera de la Unión Europea para hacer los trámites de las personas rescatadas en el mar. Sin embargo, los planes siguen siendo vagos y no mencionan ningún posible país de acogida. Diplomáticos de la UE dicen que podrían establecerse en el norte de África.