Los mitos de la masturbación siguen siendo un tema de discusión en la sociedad actual. A pesar de la abundante información disponible, todavía existen ideas erróneas sobre los efectos de autoplacer.
¿Masturbarse es “malo”?
Uno de los mitos más comunes es que la masturbación consume energía, destruye la felicidad y reduce los niveles de testosterona. Sin embargo, un estudio ha demostrado que después de siete días de abstenerse de la masturbación, los niveles de testosterona en los hombres aumentaron un 145.7% en comparación con la cantidad de referencia previa. Esto contradice la idea de que la masturbación disminuye los niveles de esta hormona.
¿Qué es el movimiento NoFap?
El Movimiento NoFap es una comunidad en línea que promueve la abstinencia de la pornografía, la masturbación y el orgasmo, también ha contribuido a la difusión de estos mitos. Aunque NoFap no establece reglas estrictas, alienta a los participantes a abstenerse de estas prácticas durante un período de tiempo determinado.
Algunos miembros incluso intentan evitar el “edging”, que es llevarse al borde del orgasmo y luego detenerse. Sin embargo, NoFap reconoce que cada individuo tiene diferentes objetivos y motivaciones, y el período de tiempo recomendado para este reinicio es de 90 días.
Mitos de la masturbación
Un mito común es que la masturbación mejora la “potencia sexual”. Sin embargo, expertos en salud sexual afirman que esto es falso. No existe evidencia científica o respaldo de profesionales sanitarios que demuestre que esta práctica mejora la potencia sexual.
Sin embargo, la masturbación puede ser beneficiosa para la salud en general. Fortalece el suelo pélvico tanto en hombres como en mujeres, previene la disfunción eréctil en hombres y la incontinencia urinaria en mujeres. Además, ayuda a mejorar el conocimiento del propio cuerpo y la calidad de vida en general.
Otro mito es que la masturbación puede disminuir el placer sexual con la pareja. Sin embargo, la forma en que se masturba puede influir en la respuesta eyaculatoria y orgásmica, así como en la sensibilidad de la persona.

Después de la masturbación, tanto hombres como mujeres pueden estar más sensibles en ciertas zonas y necesitar un tiempo para recuperarse antes de volver a ser tocados. Sin embargo, la masturbación también permite conocer mejor el propio cuerpo y saber dónde tocar para provocar más placer, lo que puede mejorar y potenciar las relaciones sexuales en pareja.
Finalmente, el mito de que cuanto más se masturbe, más ganas se tendrán de seguir haciéndolo. Si bien es cierto que la masturbación puede generar un aumento del deseo, es importante tener una rutina sexual equilibrada y no caer en la compulsión. Tanto la falta de masturbación como su práctica compulsiva pueden ser problemáticas. La clave está en encontrar un punto medio y analizar si hay un problema subyacente que debe abordarse.

Existen muchos mitos sobre la masturbación que persisten en la sociedad actual. Aunque la masturbación puede tener efectos positivos en la salud sexual y general, es importante cuestionar la veracidad de las creencias populares y buscar información basada en evidencia científica y el respaldo de profesionales sanitarios.
La masturbación es una actividad natural y normal que puede formar parte de una vida sexual saludable, siempre y cuando se practique de manera equilibrada y respetando las necesidades individuales.