Bajo el argumento de que en su gobierno hay transparencia, el presidente Andrés Manuel López Obrador dio a conocer este lunes la carta enviada al rey de España Felipe VI el 25 de marzo de 2019, en la que solicita que el Estado español pida perdón por los agravios cometidos en La Conquista.
En la carta, que fue filtrada a un medio de información español, se plantea iniciar un proceso de reconciliación rumbo a los 500 años del acontecimiento en Tenochtitlan, además de convocar a un acto conjunto en 2021 en este marco.
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En su conferencia de prensa matutina, el presidente López Obrador reiteró su invitación para realizar una ceremonia conjunta, luego de que en su momento el gobierno español rechazó la propuesta.
En la carta plantea establecer el 21 de septiembre como el día de la reconciliación histórica, fecha en la que el Estado mexicano también pedirá perdón a los pueblos originarios por la agresión y discriminación.
“No es tarde para llevar a cabo conjuntamente este propósito de acordar conjuntamente el ofrecer disculpas a los pueblos originarios e iniciar una etapa nueva de reconciliación entre nuestros pueblos y nuestros gobiernos”, indicó hoy el mandatario.
Al ser cuestionado sobre un presunto incumplimiento de la administración federal para difundir el documento después de que se solicitó por medio de una solicitud de transparencia al INAI, López Obrador instruyó hacerlo público hoy mismo y lo leyó.
En el texto recuerda que a principio de 2019 se cumplió medio milenio desde la llegada de Hernán Cortes a México, y en 2021 se conmemorarán 500 años de la caída de Tenochtitlán y a la vez los primeros 200 años de la vida independiente de México.
“Nos encontramos en un periodo en el que resulta ineludible la reflexión ante hechos que marcaron de manera decisiva la historia de nuestras naciones y que aún genera encendidas polémicas en ambos lados del océano”.
Recuerda el encarcelamiento y asesinato de Cuauhtémoc, último mandatario azteca, y “los innumerables crímenes y atropellos”, apunta que tanto en la Conquista, como en el proceso de colonización, “se cometieron incuantificables violaciones a las leyes entonces vigentes; entre las más públicas y notorias, se vulneró el principio del quinto real; se impuso la fe y se construyeron templos católicos sobre las antiguas pirámides y con los materiales de éstas”, además de la usurpación de tierras, saqueo de recursos naturales, y un sistema de segregación y esclavitud.
Dijo que los agravios a lo largo de la época colonial se debieron a políticas de Estado, agrega en la carta. Además se recuerda el intento de España de una reconquista después de la consumación de la independencia.
El Estado mexicano, subraya, no pide un resarcimiento del daño en pecuniario de los agravios, ni una intención de proceder de manera legal, “en cambio, México desea que el Estado español admita su responsabilidad histórica por esas ofensas y ofrezca la disculpas y resarcimientos políticos que convenga”.
Tras leer el documento, reiteró que para conmemorar los 200 años de la vida del México independiente, su gobierno busca recordar el acontecimiento construyendo la reconciliación con el pasado por más remoto que parezca.
Aseguró que la misiva fue usada en su momento para “enfrentarnos, para decir que cómo íbamos a atrevernos a pedir que se disculpara el gobierno español por lo sucedido en la conquista”, pero insistió que la intención “es que todos ofreciéramos disculpas” a los pueblos originarios para buscar la reconciliación.
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