Una nueva polémica se encendió en el Congreso: Morena presentó una iniciativa para adelantar la revocación de mandato de la presidenta Claudia Sheinbaum, propuesta que, según la oposición, representa un intento de “madruguete” y de manipular las reglas del juego democrático.
De acuerdo con la Constitución, el proceso revocatorio presidencial está previsto para 2028, pero el partido guinda busca que se lleve a cabo el mismo día de las elecciones intermedias de 2027, cuando se renovará la Cámara de Diputados, 17 gubernaturas y cientos de presidencias municipales.
Oposición acusa intento por “presidencializar” las elecciones
El coordinador de los diputados del PRI, Rubén Moreira, fue uno de los primeros en denunciar la intención de Morena, al señalar que Sheinbaum se metería de lleno en las urnas durante los comicios intermedios, lo que —según él— pondría en riesgo la imparcialidad del proceso electoral.
“¿Qué implica esto? Que la presidenta de la República se meta a la boleta de las elecciones intermedias, con lo que esto significa en contra de la democracia mexicana”, advirtió Moreira. La oposición acusa que “presidencializar” los comicios violaría el carácter ciudadano y apartidista que debe tener una revocación de mandato. En otras palabras, la figura que nació para evaluar el desempeño presidencial se convertiría en una herramienta política para reforzar el poder del partido gobernante.
La Constitución prevé la revocación hasta 2028
Actualmente, la Carta Magna establece que la revocación de mandato presidencial debe realizarse a los tres años de gestión, lo que en el caso de Claudia Sheinbaum corresponde al año 2028.
La iniciativa de Morena, de aprobarse, significaría adelantar casi un año este proceso, haciendo coincidir la consulta con la elección intermedia de 2027, donde Morena buscará conservar su mayoría en el Congreso y mantener el control político en los estados.
“La presidenta tiene miedo de perder la mayoría”: Rubén Moreira
El priista Rubén Moreira no se guardó nada y aseguró que la intención detrás de esta propuesta es asegurar la continuidad del morenismo en el poder:
“Yo creo que la presidenta tiene miedo de perder la mayoría y se quiere meter a las elecciones”, declaró. De concretarse, la iniciativa abriría la puerta a lo que la oposición llama una “operación de carro completo”, con Sheinbaum al frente de una estrategia electoral que rompería los acuerdos logrados entre todos los partidos en 2019, cuando se definieron las reglas de la revocación de mandato.
Por ahora, la propuesta sigue en revisión dentro de la Cámara de Diputados. Sin embargo, los partidos opositores ya adelantaron que buscarán frenar cualquier intento de modificar los tiempos establecidos en la Constitución, advirtiendo que se trata de una jugada que “debilita la democracia y fortalece el control del poder”.












