1 de cada 17 mil personas en el mundo es albina y en México hay una población significativa que tiene esta condición.
La ignorancia y la falta de información sobre el albinismo ha sido causa de hostigamiento y discriminación hacia estas personas a nivel mundial. Las personas con albinismo están en riesgo de aislamiento porque esta condición es malinterpretada.
Pero, ¿Qué es el albinismo? Es una condición genética caracterizada por la ausencia de pigmentación y melanina en la piel, en el cabello y los ojos. Es un trastorno que no es contagioso y es hereditario.
Presentan principalmente tres problemas; de visión, dermatológicos y sociales.
En el caso de la vista pueden desarrollar nistagmo, estrabismo, fotofobia, miopía y en muchos casos desviación del nervio óptico. Es por eso, que se les recomienda usar lentes especiales que reduzcan la luminosidad de un 15% en espacios cerrados, hasta un 80% en espacios abiertos.
En el caso de la piel, pueden sufrir de quemaduras por exposición al sol y si se vuelven frecuentes, pueden evolucionar en cáncer. Es por eso que resulta fundamental el uso de protector solar y ropa adecuada para proteger los rayos uv durante toda su vida.
En todas partes del mundo hay personas con esta condición, y en la mayoría de los casos se enfrentan a sociedades poco informadas, donde los mitos predominan. Esta situación es mucho más delicada en países de África, ya que la condición se vuelve más evidente por su contraste, y sus creencias.
Las únicas limitaciones que tiene una albina o albino son visuales y dermatológicas. Ruby Vizcarra, una mexicana que convirtió el albinismo en arte en México, abrazó con fuerza su condición y se convirtió en activista fundando el primer movimiento albino en el país, con el fin de ayudar a otras personas iguales a ella. Además, ha destacado en producciones artísticas como cine y modelaje.
