Indi Gregory, una bebé de 8 meses de nacida, tiene una rara enfermedad incurable, su padecimiento es mitocondrial, lo que hace que sus células no produzcan suficiente energía, lo que le provoca muchos dolores. Sus médicos han dicho que no tiene caso seguir con el tratamiento.
Ante la difícil situación, el Tribunal de Gran Bretaña ordenó que la menor fuera desconectada del soporte vital, a pesar de que los padres se niegan, por lo que impugnaron el veredicto, solicitando que el final del tratamiento se realizara en su casa y no en un hospital u hospicio.
Finalmente, el tribunal de Gran Bretaña emitió un nuevo veredicto en que no les permitió a los padres que desconectaran a la menor en su casa.

¿Por qué el tribunal no quiere que la menor sea desconectada en su casa?
Los padres enviaron la solicitud para que Indu Gregory fuera desconectada en su casa, no obstante, el tribunal determinó que ya no era posible debido por el deterioro en la salud de la menor y porque los argumentos de los papás no tenían fundamento.
“Los motivos del recurso carecen totalmente de fundamento”, declaró el juez Peter Jackson al dictar sentencia en el Tribunal de Apelación del Reino Unido.
Desde octubre, el Tribunal Supremo aceptó que se le quitara el soporte vital a la menor, pero de inmediato rechazó la petición de los padres para que esto ocurriera en su casa o llevar a la pequeña a un hospital infantil del Vaticano, que era un nuevo intento por aplazar la decisión.
Incluso el gobierno de Italia concedió a la pequeña la nacionalidad italiana para impedir que los médicos la desconectaran y así poderla trasladar a Roma, y darle la oportunidad a los padres de buscar tratamientos en otro país.
No obstante, el juez indicó que el padre de la bebé aceptó que el tribunal tomara decisiones sobre su tratamiento, que es lo que actualmente está sucediendo.