Lo que pretendía ser una demostración de unión familiar en las redes sociales de Poncho de Nigris, terminó encendiendo una polémica en las secciones de comentarios. Aquí te contamos la polémica que enfrentó el empresario e influencer por dar un “pastelazo” a su hijo aunque éste había pedido que no lo hicieran.
Hace unos días Poncho de Nigris y Marcela Mistral celebraron el cumpleaños número 9 de Ponchito, el primero de sus 3 hijos juntos. Compartieron un video breve del momento en que el niño da la tradicional “mordida” al pastel, pero esto provocó un debate en redes sociales.
Poncho de Nigris habla sin tapujos del distanciamiento de su hija
Poncho de Nigris avienta a su hijo al pastel y lo critican en redes sociales
En el video, se aprecia que Ponchito está celebrando su cumpleaños en una fiesta con su familia y amigos. El niño titubea varias veces antes de darle la mordida al pastel e indica con ademanes que no quiere que lo empujen, pero su padre lo empuja de todos modos a manera de broma. Inmediatamente después, el niño llora y se retira, mientras quienes lo rodean ríen.
“Mordida es normal en todo el mundo”, escribió el empresario para acompañar el video, además de una felicitación cariñosa para su hijo.
En los comentarios de Instagram y TikTok, muchas personas se manifestaron en contra de seguir esta tradición cuando la persona festejada del cumpleaños no quiere que la empujen y lo deja claro.
“Cuando un niño dice que no, se tiene que respetar su decisión”, escribió una usuaria de redes sociales. “Hay que aprender a respetar” y “arruina un buen momento”, son otras de las frases que pueden leerse. Muchos seguidores de Poncho de Nigris compartieron que ellos nunca disfrutaron que los empujaran al pastel como él lo hizo con su hijo.
Una persona cuestionó la importancia que estos actos pequeños tienen como parte de la crianza. “Queremos hijos empoderados que sepan poner límites de grandes, pero yo como papá sí puedo no respetar tu decisión y querer que seas obediente para demostrarle a mis seguidores lo divertido que puedo ser”, escribió.
Muchas otras personas se quejaron de que una tradición tan normalizada sea vista como algo malo, y acusaron a los demás de estar “exagerando”.
También hubo numerosas burlas con estereotipos de género dirigidas hacia el hijo de Poncho, por haber llorado cuando lo empujaron al pastel. Sin embargo, algunas personas señalaron que el llanto es una manera de expresar la molestia y frustración, lo cual es normal en un niño de su edad.
