Mariana vive con sus dos hijos pequeños y su esposo Sergio, quien aprovecha cada oportunidad para hacerla menos y hacerle saber que él es quien manda y que ella no tiene voz ni voto.
Lo Que Callamos Las Mujeres | Capítulo | Mariana: Ya no soy tuya
Como las agresiones son a diario, no es raro que los niños vean cómo su papá agrede a su mamá, lo que lleva a la niña a tener crisis, mientras que el niño sólo quiere defender a su mamá e incluso se vuelve violento con tal de querer defenderla y deshacerse de su papá.
Sergio tiene un grado muy fuerte de agresividad, pues sus celos llevaron a asesinar a un exnovio de Mariana aunque ella le aseguró que tenían años de no verse ni saber uno del otro. Alfredo, el exnovio, fue encontrado muerto en la carretera y con signos de tortura, por lo que Sergio, para amenazarla, no duda en revelarle a Mariana qu él había estado detrás de ese asesinato.
Al llegar a la escuela de sus hijos, una maestra que se ha dado cuenta de la violencia que se vive en su casa, pide hablar con ella en un lugar seguro y le da el teléfono de un refugio donde puede pedir ayuda, pues Mariana sabe lo difícil que sería enfrentarse a su esposo siendo el fiscal del estado y teniendo todos los contactos de su lado.
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Al estar en su casa, Sergio le exige que se muestre en una de las tantas cámaras que hay en su casa, pues no la ha visto, y ella comienza a reclamarle de la vida que le ha dado y que quiere el divorcio, hecho que lo hace enojar y regresar directo a su casa para enfentarla de cara. Lo único que ella hace es correr para tratar de defenderla pero él la alcanza y la golpea para posteriormente amenazarla de muerte.
El esposo regresa temprano a la casa para comer en familia e incluso le lleva un ramo de flores a su esposa para disculparse, sin embargo ella no las toma en cuenta. Su perro se acerca para hacer cariños y convivir con la familia y Sergio se molesta porque siente que tratan mejor al perro que a él, por lo que al enfurecer, decide sacar su pistola y matar al perro sin dudarlo. Ante esta acción, Mariana sabe que no puede estar más con su marido, quien al discutir con ella por el perro termina dándole una gran golpiza y le rompe la nariz.
En la noche, Mariana despierta a sus hijos para que huyan de la casa. Deja el carro abandonado junto con su celular para no ser localizada y habló al refugio para pedir apoyo. Ellas fueron por Mariana y sus hijos, los resguardaron y le dijeron cómo podía proceder para defenderse de su esposo.
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Así es como Mariana logra levantar denuncia en contra de Sergio; además, regresa a su casa para recuperar las grabaciones de las cámaras de su casa y así tener pruebas en su contra.
El gobernador, amigo de Sergio, al enterarse de lo mediático que se ha vuelto el caso, decide darle la espalda a Sergio y grabar un video que pareciera que el Estado es quien protegió a Mariana y encarcelará a Sergio, todo con tal de mantener su buena imagen.
