El concepto de ‘niño interior’ es utilizado por diversas filosofías espirituales y con algunos psicólogos para definir lo vivido durante la etapa de la infancia, una época crucial para nuestro desarrollo emocional que de no atenderse puede ocasionarnos varios problemas en nuestra vida adulta.
Por ello, existen diversas terapias que tienen como objetivo conectar con tu niño interior y poder dar solución a las cosas del pasado, que ahora como adulto te corresponden enfrentar. Se trata de una forma de sanar los traumas de la infancia para poder seguir adelante con el uso de la resiliencia y la determinación.
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Las mejores terapias para sanar tu niño interior
Reconexión emocional
Una de las terapias más comunes para sanar la relación con nuestro niño interior es la de reconexión emocional que, como su nombre lo indica, se sustenta en buscar reconectar con las emociones y necesidades que no fueron satisfechas durante nuestra infancia.
Se trata de remontarnos al pasado y encontrar aquello que nos hizo falta a nivel emocional para dárnoslo a nosotros mismos ahora que somos adultos, por ejemplo, si de niño no te sentías escuchado, es necesario que de adultos nos prestemos atención y practiquemos la autocompasión y el autocuidado.
Energía reiki y cristales
Otra de las terapias más poderosas para conectar con nuestro niño interior se basa en el uso de elementos espirituales como los cuarzos o cristales y el reiki. Son una forma de concentrarnos y canalizar toda nuestra energía para poder sanarnos a nosotros mismos de manera emocional y espiritual, incluyendo los traumas de nuestra infancia.
Constelaciones familiares
Se trata de otro tipo de terapia espiritual que nos ayudará a descubrir cuáles son los problemas emocionales y espirituales heredados en nuestro árbol genealógico que generaron traumas en nuestro niño interior. Darnos cuenta de que muchas veces la violencia y los conflictos son patrones aprendidos y repetidos nos ayudarán a liberarnos de ciertas culpas que hemos cargado desde infantes.