En el tranquilo vecindario de Leimert Park, en el sur de California, una mujer se encontró con una sorpresa inesperada debajo de su propia casa: una familia de coyotes. Este encuentro inusual no solo fue impactante, sino que también desencadenó preocupaciones de seguridad entre los residentes locales.
Todo comenzó con un paseo rutinario de una vecina con su perro. En un instante, la tranquilidad se vio interrumpida cuando se topó cara a cara con una manada de coyotes. Las cámaras de vigilancia capturaron el momento en que tuvo que correr para estar a salvo, una escena que, aunque inusual, se volvió preocupantemente común en el área.
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Según consignó el medio KTLA, los residentes de Leimert Park observaron un aumento en la presencia de coyotes en el vecindario, lo que generó interrogantes sobre su seguridad. Phaedra Harris, una de las residentes, mencionó al medio citado que fue testigo de los eventos que desencadenaron la alarma principal. En medio de la noche, los gritos desesperados de una mujer la alertaron sobre la presencia amenazante de estos animales.
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Poco después, se percató de que la familia de coyotes vivía debajo de su propia casa, lo que representó un shock. Un video enviado por su vecina confirmó sus sospechas: los animales habían encontrado refugio en su propiedad. Las imágenes los mostraban ubicados en su jardín delantero.
¿Cuáles fueron las soluciones que encontró la mujer de California ante la presencia de coyotes en su casa?
Ante esta situación, Harris buscó ayuda. Sin embargo, se enfrentó a un gran obstáculo cuando ni la policía ni el control de animales pudieron proporcionar una solución inmediata. Finalmente, recurrió a Humane Wildlife Control, una organización que utiliza métodos éticos para lidiar con la vida silvestre.
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Para reparar la situación, el espacio de acceso fue sellado, y los coyotes eventualmente abandonaron la propiedad de Harris. Aunque este incidente fue desconcertante, la mujer reconoció la importancia de coexistir pacíficamente con la vida silvestre. “Lo que he aprendido es que básicamente tenemos que aprender a vivir con los coyotes”, aseguró.