La portería de Cruz Azul volvió a convertirse en tema de debate. Kevin Mier, fichaje estelar que llegó desde Colombia para blindar el arco celeste, atraviesa una etapa complicada en el torneo. Sus atajadas decisivas conviven con errores que han terminado en goles dolorosos para La Máquina, y ahora la paciencia parece agotarse.
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¡Atajadón de Kevin Mier! América 0-0 Cruz Azul | Semifinal Ida, Apertura 2024
El respaldo tiene límite
La directiva y el cuerpo técnico reconocen que Mier es un portero de gran calidad y que su confianza es vital para que vuelva a mostrar la seguridad con la que se ganó a la afición en sus primeros partidos. Sin embargo, también hay conciencia de que la portería es un lugar en el que no se permiten titubeos.
Dentro del club se sabe que un nuevo error que comprometa el resultado podría abrir la puerta a un cambio inmediato. Andrés Gudiño, quien espera su oportunidad, ya está considerado como opción real para tomar el arco en caso de que la situación lo exija.
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La presión que pesa sobre el arquero
El momento de Kevin Mier no solo se explica en la cancha. Su lenguaje corporal y su estado anímico han despertado dudas, al grado de que se habla de un bajón personal que podría estar influyendo en su rendimiento. Esa es la gran preocupación: que lo mental esté jugando en contra en un torneo donde cada detalle cuenta.
Cruz Azul está peleando en la parte alta de la tabla y sabe que la solidez defensiva es clave para mantenerse en la lucha. Por eso, Mier está frente a un punto de quiebre: demostrar que tiene la fortaleza para sostener la titularidad o ceder su lugar en un momento crítico de la temporada.

Una decisión que puede marcar la temporada
El arco cementero no admite más dudas. El respaldo existe, pero no es eterno. Kevin Mier tendrá que responder con seguridad y personalidad en los próximos partidos para disipar las sombras que lo rodean. Un error más podría no solo costarle la titularidad, sino también alterar la estabilidad de un equipo que busca con urgencia la décima estrella.