¡Misioneros digitales! Lo que comenzó como un recurso improvisado durante la contingencia sanitaria por Covid-29, hoy se ha convertido en una estrategia pastoral global: la Iglesia católica está invirtiendo de lleno en la evangelización digital.

En México, esta tendencia dejó de ser una especia de experimento; Sacerdotes como el padre Heriberto García y el padre Borre acumulan millones de vistas en TikTok, YouTube e Instagram, convirtiéndose en referentes de una generación que busca sentido entre videos de segundos.

Evangelización digital: ¿por qué la Iglesia ahora quiere “habitar en el algoritmo”?

“La pregunta sería qué están buscando detrás del scroll tanto tiempo. Están buscando sentido”, afirma el padre Heriberto García, uno de los sacerdotes mexicanos más influyentes en redes.

Para esta nueva ola de evangelizadores, el razonamiento es simple: si los jóvenes pasan horas frente a la pantalla, la Iglesia debe estar justo ahí. El padre Borre, pionero de la evangelización digital, lo resume: “La Iglesia debe estar donde están sus hijos”.

Del celular al templo: la misión no es viralizar, sino acompañar

A diferencia de los creadores digitales tradicionales, los sacerdotes influencers aseguran que su objetivo no es “retener audiencia”, sino guiar espiritualmente: “El plan es hacer el primer anuncio… de donde se origina la evangelización, para que pasen de la pantalla al altar”, explica el padre Heriberto.

El padre Borre añade una metáfora que se ha viralizado: “Somos vagabundos que le decimos a otros vagabundos dónde encontramos pan. No somos los dueños de la panadería; solo mostramos el camino.”

¿Cómo lo ve el Vaticano? De sospecha a reconocimiento oficial

Lejos de rechazar esta tendencia, la jerarquía eclesiástica ya la considera una prioridad. El Vaticano ha oficializado el concepto de “misioneros digitales”, dejando atrás la etiqueta informal de “contrabandistas del Evangelio”, como en algún momento se llamó a quienes evangelizaban sin directrices formales.

“Antes lo hacíamos sin permiso, pero movidos por el Espíritu Santo, que tenía prisa de hablar de Dios”, recuerda el padre Borre.

La Iglesia influencer: una nueva trinchera de misión

En la actualidad, el algoritmo se ha convertido en una trinchera de misión para miles de jóvenes sacerdotes alrededor del mundo. Aunque las plataformas son efímeras, aseguran que su mensaje no lo es: “Lo disfruto porque es algo que tengo que hacer como respuesta al llamado de Cristo”, concluye el padre Heriberto.

En un mundo saturado de contenido fugaz, ¿puede este movimiento digital convertirse en la próxima gran renovación espiritual para las nuevas generaciones?