Un hombre que profirió insultos raciales y escupió a un conductor de autobús en la región de Hayes, Londres, ha sido condenado tras ser identificado rápidamente por agentes de la Policía Metropolitana.
El incidente ocurrió el pasado miércoles 7 de agosto en Coldharbour Lane, cuando Michael Mongan, de 39 años, se enfrentó al conductor después de que se le negara el acceso al autobús por no tener fondos suficientes para pagar el viaje.
Según testigos y un video que se ha vuelto viral en redes sociales, Mongan, residente de Castle Road, Ealing, gritó insultos islamófobos y lanzó varias amenazas mientras escupía repetidamente contra la cabina del conductor.
Ante esta situación, la policía fue alertada a las 12:25 horas, y tras una rápida investigación, Mongan fue arrestado el viernes 9 de agosto.
This bus driver was simply doing his job when he was racially abused and spat at.
— Metropolitan Police (@metpoliceuk) August 10, 2024
Today, Michael Mongan pleaded guilty at court following a rapid investigation by @MPSRTPC officers.
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Acusan a hombre de abusar racialmente y escupir contra conductor de autobús
Mongan fue acusado de un delito de orden público con agravantes raciales y de daños criminales. Durante su comparecencia ante el Tribunal de Magistrados de Uxbridge el sábado 10 de agosto, se declaró culpable de ambos cargos y fue puesto en prisión preventiva a la espera de la sentencia, programada para el próximo martes 13 de agosto.
Por su parte, el inspector detective Jonathan Potter, del Comando de Policía de Carreteras y Transporte, elogió la rápida acción de los oficiales y subrayó la importancia de proteger a los trabajadores del transporte público de Londres.
“El conductor del autobús que fue insultado racialmente y escupido por Michael Mongan simplemente estaba haciendo su trabajo. Él y todo el resto del personal que trabaja en la red de transporte de Londres tiene derecho a hacerlo en condiciones de seguridad, libres de amenazas e intimidaciones inaceptables”, declaró Potter.
Es así que la condena de Mongan envía un mensaje claro de que la policía actuará con firmeza para responsabilizar a quienes cometan actos de odio y violencia contra otras personas en el transporte público.
