La Canaco de la CDMX indicó que las pérdidas por daños a establecimientos comerciales los días 5 y 8 de junio suman 22 millones de pesos.
Nos oponemos, dijo, a que la protesta pública derive en actos vandálicos que desvirtúen propósitos que pueden ser legítimos, “a que los comerciantes y sus empleados sigan siendo el centro de los ataques”.
Sostuvo que debe haber protolocos para el actuar policial, pero en ningún caso debe impedirse su actuación “cuando las manifestaciones sean aprovechadas por grupos vandálicos para cometer actos ilícitos, como fue el día de ayer, el pasado 5 de junio, y en otras tantas ocasiones”..
Dijo que las y los jóvenes encapuchados representan a grupos de interés y no a un movimiento social “Su afán es desestabilizar usando cualquier pretexto y de ello da cuenta su organización y entrenamiento”.
Finalmente, subrayó el peligro que representa una actitud cautelosa de la autoridad, porque puede ser entendida por estos grupos vandálicos como una licencia de impunidad.