Una de las etapas que crean un lazo más íntimo entre la madre y su hijo es sin duda la lactancia, es por ello que la actriz Fernanda Castillo se despide de ella con emotivas fotos de su bebé y compartiendo un mensaje muy poderoso, descubre qué fue lo que dijo.
Fruto de su relación con el también actor, Erik Hayser, Fernanda Castillo dio a luz al pequeño Liam en diciembre de 2020 y desde entonces, como era de esperarse, su vida cambió rotundamente, la atención está enfocada en disfrutar cada momento con el pequeño y procurar su bienestar y cuidado y así lo han hecho notar en publicaciones.
¿Cómo son las fotos del bebé de Fernanda Castillo despidiéndose de la lactancia?
La actriz abrió con un poderoso mensaje dirigido a las mujeres que han tenido que lactar sin importar por cuánto tiempo y principalmente, el destetar que puede ser un camino aún más complejo, que implica el inicio de una nueva etapa en la vida de los bebés.
“Escribo esto al terminar con una de las etapas que me hacen sentirme más orgullosa. Después de dos años de lactancia Liam ha decidido que ya es un niño grande y que va a tomar mamila”.
Un tributo a todas esas mujeres que han pasado por el complejo proceso de lactar (el tiempo que sea) y de destetar, que fue el que más me costó a mí asimilar, darme cuenta que mi bebe había crecido.
Además, Fernanda aprovechó la ocasión para dejar de romantizar la lactancia y dejar ver que es proceso que puede estar lleno de complicaciones, de dolor y de incertidumbre.
“A veces de dolor y de toda la perseverancia de la que era capaz, pero sobre todo de momentos maravillosos, de apego con Liam, que se quedaran en mi memoria y de la certeza de estarle dando un regalo a su salud y a su alma. Mamá estará siempre”, resaltó la actriz.
Vale recordar que no es la primera vez que Fernanda lo hace, pues en una ocasión ya había abordado el miedo que le daba amamantar, incluso más que el parto y esto, debido a las experencias que había leído y lo recordamos con el siguiente mensaje:
“Yo solía ver mujeres amamantando a sus bebes y pensar que era muy fácil, (tooodo menos eso) después me embaracé y al empezar a investigar y escuchar las diferentes experiencias, me aterré. Me daba más miedo la lactancia que el parto”.
Así mismo, cuando empezó el proceso ella misma con su hijo, afirmó que necesitó sondas para alimentar a Liam, que tuvo obstrucciones en los senos, problemas en la espalda, ansiedad por no saber si estaba alimentándolo de la forma correcta y que sintió que sólo vivía para sacarse leche.