Rosa Ochoa es originaria de la Ciudad de México, mujer con sabiduría de calle, carácter fuerte, sabe arrimarse a quien mejor le conviene. Es capaz de hacer lo necesario para asegurar su subsistencia.
Ha trabajado en “Dulce Hogar” durante 15 años y se ha convertido en empleada de confianza y goza de algunos privilegios, como cobrar bonos por algunos “encargos especiales”. Rosa está al tanto que en “Dulce Hogar” no todo es tan “dulce” como parece, sabe que algunas chicas son explotadas y usadas en actividades clandestinas, pero ella se limita a cumplir con las labores que le asignan y cobrar su dinero.
Entre sus funciones está “regentear el albergue”, espacio de “Dulce Hogar” donde viven las jóvenes que prestarán los servicios que las Basurto les asignen. Rosa será una de las mayores contras para Laura y le pondrá obstáculos para el desarrollo de su investigación.
Mantiene una fogosa relación con Jaime, chofer y empleado de la agencia, a quien considera el hombre perfecto para casarse y salir de Dulce Hogar para empezar una nueva vida, donde no tengan que esconder su romance de nadie.