El convoy que trasladó al papa Francisco, jerarca de la Iglesia Católica, llegó a la Curia Episcopal para comer con un grupo de indígenas.
Los chiapanecos y visitantes realizaron una valla en la ruta para saludar al Papa, ondearon banderines, entonaron cánticos y echaron porras mientras el pontífice con una sonrisa en la cara los bendice y agradece las muestras de cariño.
A su paso por el centro de la ciudad repicaron las campanas de la Catedral de San bde las Casas que se confundían con la algarabía de cientos de personas que lo esperaban, incluso hubo quienes corrieron a los lados de la valla humana para verlo el mayor tiempo posible.
