Meses atrás, los habitantes de California fueron informados sobre un proyecto secreto que un empresario tenía en mente desde hace un tiempo: construir una nueva ciudad futurista en el Estado Dorado. Esta idea, que cuenta con una inversión millonaria financiada principalmente por un grupo selecto de magnates de Silicon Valley, es llevada a cabo por Jan Sramek, un exoperador del banco Goldman Sachs, que se mudó al territorio norteamericano para buscar nuevas oportunidades.
California Forever es el nombre que eligió para su localidad, que estará basada en el avance de las tecnologías con la idea de recrear Zúrich en Estados Unidos. Luego de fundar la compañía Flannery Associates en el 2017, consiguió captar a varios millonarios para desarrollar su proyecto y así pudo adquirir la compra de numerosos terrenos, sumando alrededor de 60,000 acres (24,200 hectáreas) en total al noreste de San Francisco, en el condado rural de Solano.
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¿Cómo hacer posible que el acceso a la vivienda digna sea una realidad para todos?
Aunque este plan ya se encuentra en marcha, se mantuvo en privado durante varios años hasta que el propio Sramek decidió comunicarlo. A través de su página web, el empresario explicó los avances de la nueva ciudad e informó que la recaudación hasta el momento había sido de más de 900 millones de dólares, con lo que se compraron más de 200 kilómetros cuadrados.
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¿Cuál es el objetivo de California Forever?
Según el propietario, esta idea pretende ser "un lugar del mundo más transitable, habitable y sostenible". Por ello, esta gran urbe podría contar además con "empleos locales bien remunerados, granjas solares, espacios abiertos, buenas escuelas, seguridad pública, sin personas carentes de techo y eficientes infraestructuras de servicios para agua, transporte y protección de fuegos forestales".
Asimismo, el empresario también quiere abordar desafíos socioeconómicos y urbanos en California. Si tiene éxito, podría servir como un modelo para futuros desarrollos en todo el mundo, por lo que demostraría que es posible crear localidades sostenibles, inclusivas y económicas.
Sin embargo, no todos están conformes con esta creación a la que llaman "ciudad para la élite". En diálogo con The New York Times, el alcalde de Vallejo, Robert McConell, dijo: "No me puedo imaginar que los supervisores permitan una cosa así, me sorprende que gente tan inteligente pierda su tiempo y su dinero en este esfuerzo".
