Días después de que el alcalde de Nueva York, Eric Adams, expresara públicamente que colaborará con el próximo zar fronterizo, Tom Homan, para la deportación masiva de inmigrantes indocumentados, una nueva declaración de su parte preocupó a los miles de extranjeros que residen en su ciudad por una decisión que podría tomar.
El intendente de la Gran Manzana le mostró su apoyo al hombre elegido por Donald Trump para asegurar las fronteras de Estados Unidos y esto ocasionó una ola de críticas por parte de los demócratas. Sin embargo, él declaró: "No voy a entrar en guerra con esta administración. Voy a trabajar con ella".
En principio, la medida aplicaría para aquellas personas no autorizadas con antecedentes penales u órdenes de expulsión, pero durante los últimos días, Adams reabrió un debate que podría alterar las reglas judiciales para los más de 400,000 indocumentados que viven en la localidad.
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¿Qué planea hacer Adams con los inmigrantes en Nueva York?
El alcalde mencionó la posibilidad de modificar la ley santuario de la ciudad de Nueva York del 2014, la cual establece que los funcionarios solo pueden entregar a personas indocumentadas a las autoridades federales si han sido condenadas por uno o más de los 170 delitos graves en los últimos cinco años y solo después de que un juez firme una orden.
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Durante una conferencia de prensa la semana pasada, Adams sugirió que a los inmigrantes no se les debe legalmente el debido proceso y afirmó que "la Constitución es para los estadounidenses". Estas palabras no cayeron bien en su partido político, y generaron una ola de críticas a sus dichos.
Por otra parte, sus declaraciones generaron temor en la comunidad, ya que podrían ser entregados a las agencias de inmigración antes de que sus casos penales pasen la prueba del debido proceso.
¿Podrá Nueva York expulsar inmigrantes indocumentados?
Desde el ayuntamiento informaron que todavía no piensan revertir el estatus de santuario de la ciudad, por lo que Adams deberá cumplir las leyes actuales, aunque podría suspenderlas como parte de una orden de emergencia.
Asimismo, mencionaron que ninguna política municipal puede impedir que los inmigrantes sean deportados directamente. Solo los agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) tienen la autoridad para arrestar a no ciudadanos, incluso sin la ayuda de la ciudad.
En su última aparición, Adams dijo: "Esta es una ciudad abierta a todos, y todos tienen derecho a la protección de la Constitución. Todo lo que hablábamos era sobre los reincidentes. Nuestra Constitución es para todos nosotros, incluso para los inmigrantes indocumentados".
