La Fiscalía del Distrito Central de California acusó a 17 personas, entre ellas algunos mexicanos, que habrían creado una red de tráfico de fentanilo y heroína desde la frontera con Estados Unidos; la droga la ingresaban a través de extintores que trasladaban en cargamentos de chatarra.
Esta operación, que duró dos años, recibió el nombre de “Smoke Jumpers” y concluyó con más de 13 incautaciones en las que se obtuvieron cerca de 680.992 píldoras de fentanilo, 3 kilogramos de polvo de fentanilo, 17 kilogramos de heroína y 10.418 píldoras que contenían metanfetaminas.
De acuerdo con las autoridades estadounidenses, en las últimas semanas se logró la detención de nueve personas implicadas en esta red. Además, se estima que hay otros siete acusados que están prófugos y se cree que se encuentran en México.
“Estos acusados usaron una red sofisticada para el contrabando de grandes cantidades de fentanilo a nuestro país... Sabemos que cada píldora de fentanilo puede ser letal, pero a estos acusados no les importaba la destrucción generalizada que estaban causando”, señaló el fiscal federal Martin Estrada.
Traficaban fentanilo en extintores que enviaban de México
De acuerdo con las investigaciones los sujetos utilizaban Carin Trucking, una organización con sede en San Diego que operaba al menos seis camiones recolectores acoplados para ingresar a Estados Unidos desde México.
Una vez en suelo norteamericano, llevaban la entrega de drogas en el área de Los Ángeles. Estos narcóticos incluían píldoras falsificadas que contenían fentanilo y se encontraban ocultas en extintores inicialmente disimulados como de chatarra y, posteriormente, en extintores que simulaban ser legítimos.
“Los investigadores han observado múltiples transacciones de drogas que involucran a conductores de camiones y sus camiones con acoplado... El conductor del camión conducía a Estados Unidos desde México y cruzaba la frontera, generalmente llevando una carga de chatarra, pero oculto entre la chatarra se encontraba un extintor que contenía drogas”, añadió la Fiscalía del Distrito Central de California.
Podrían recibir pena perpetua
La acusación de la Fiscalía expone que para cada una de las personas involucradas se prevé una pena mínima obligatoria de 10 años en una prisión federal y posible pena perpetua.
