Ante el freno indefinido a la construcción del tramo 5 del Tren Maya, el Gobierno federal, a través del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), impugnó la decisión de un juez federal.
Según registros judiciales el apoderado legal del Fonatur-Tren Maya, Marco Aurelio Colín promovió un recurso de revisión en contra de la suspensión definitiva dictada por el titular del Juzgado Primero de Distrito en el Estado de Yucatán, que paralizó las obras en la región por falta de estudios de impacto ambiental.
Tribunal federal resolverá si mantiene o no freno a obra del Tren Maya
De esta forma, será un Tribunal Colegiado el que resuelva en los próximos meses si confirma o revierte el freno a los trabajos de construcción del Tren Maya, en la zona que va de Playa del Carmen a Tulum, en Quintana Roo.
Los magistrados federales no tienen plazo para resolver la impugnación promovida por el Fonatur e incluso el juicio podría ser llevado hasta la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), si el tribunal o alguna de las partes buscan que se ejerza la facultad de atracción.
Próxima audiencia está prevista el 23 de junio
De momento, el juez Fernando Novelo agendó para el 23 de junio la audiencia constitucional en la que podría resolver el amparo impulsado por tres buzos; sin embargo, la diligencia podría ser pospuesta ante la apelación del Fonatur.
Desde hace un par de meses el titular del Juzgado Primero de Distrito de Mérida, Yucatán, Fernando Novelo otorgó a organizaciones ambientalistas una suspensión provisional para frenar las obras de construcción del tramo 5 del Tren Maya.
Juez frenó obras por falta de estudios de impacto ambiental
La suspensión definitiva concedida el 27 de mayo en este caso, tiene el efecto de que el Gobierno Federal “no puede continuar con la construcción, infraestructura, remoción o destrucción de la biodiversidad del terreno o cualquier otra actividad que implique la ejecución material de la obra”, hasta que se resuelva el juicio de amparo o la decisión sea revertida por un tribunal federal.
El juzgador argumentó que el tramo 5 del Tren Maya, que va de Playa del Carmen a Tulum, Quintana Roo, no cuenta con una autorización en materia de impacto ambiental, y por tanto su determinación es procedente para evitar daños “inminentes al medio ambiente de difícil o imposible reparación”.
