Una tragedia se registró en Colorado, Estados Unidos, cuando un hombre murió luego de ser mordido por un lagarto venenoso, conocido como monstruo de Gila, el cual tenía en su casa como mascota, de manera ilegal.
La víctima fue identificada como Christopher Ward, de 34 años de edad, quien tenía dos reptiles, uno de ellos le mordió la mano y no lo soltaba. La novia del hombre entró a la habitación y llamó al 911 cuando vio la escena.
Las autoridades indicaron que de inmediato comenzó a presentar síntomas por el veneno, vomitó varias veces antes de desmayarse y finalmente su respiración se detuvo.
Los paramédicos lo trasladaron a un hospital cercano donde lo conectaron a un respirador artificial, sin embargo, momentos después fue declarado con muerte cerebral, indicó el Departamento de Policía de Lakewood.
Los lagartos fueron retirados de la casa del hombre por personal de Parques y Vida Silvestre de Colorado y del Departamento de Recursos Naturales, serán enviados a un parque en Dakota del Sur.
A Colorado man is dead after a pet Gila monster bite - Christopher Ward was taken to a hospital shortly after being bitten by one of his two pet Gila monsters on Feb. 12. He was soon placed on life support and died Friday, Lakewood police said Tuesday. v… https://t.co/cxjeogxYs9
— Olav Mitchell Underdal (@omunderdal) February 21, 2024
La novia del Ward indicó que él compró el lagarto que lo mordió, en Denver el año pasado cuando el animal tenía apenas un año de edad, desde entonces se hizo cargo de su mascota en su casa.
¿Qué tan venenoso es el monstruo de Gila?
Los monstruos de Gila son considerados los lagartos más grandes de Estados Unidos, pueden llegar a medir hasta 55 centímetros de largo, pero son muy venenosos.
De acuerdo con Smithsonian el veneno de estos lagartos puede ser tan tóxico como el de la serpiente de cascabel occidental y desafortunadamente no existe un antídoto que contrarreste los efectos, pero pocas veces llega a ser mortal.
“La mordida de un monstruo de Gila es muy fuerte, y el lagarto puede no aflojar su agarre durante varios segundos. Puede incluso masticar para que el veneno penetre más profundamente en la herida”, indicó el zoológico de San Diego.