Acapulco, un lugar paradisíaco elegido por celebridades y políticos por sus lugares de ensueño, ahora se encuentra sumido entre el desastre y el olvido de Autoridades tras el paso del huracán “Otis”.
El puerto de Acapulco, uno de los puertos más codiciados, ahora está cubierta de cascajo, arena y casas sostenidas con los lamentos de quienes sobrevivieron al huracán.
Acapulco fue sacudido por la furia de “Otis”, cuando en otros años fue escenario de numerosas películas.
Ahora una tormenta de pánico dejó sin aliento a Acapulco, está sediento y sin comida, que dejó casas y familia rotas.
Es urgente rescatarlo porque Acapulco es Guerrero.