¡Escapan de anexo en Guadalupe, Nuevo León! 10 internos denuncian malos tratos
Así lucen las instalaciones del anexo “Gritos de libertad” en Guadalupe; donde se reportó el escape de 10 internos por supuesto maltrato físico.
El reciente escape de 10 personas de un centro de rehabilitación ubicado en el municipio de Guadalupe, Nuevo León , puso en el ojo del huracán a este anexo por la forma en que operaba el personal encargado.
Tras la fuga, los internos denunciaron haber sido víctimas de malos tratos, por lo que incluso, familiares decidieron llevarse a sus hijos que tenían internados. A pesar de las severas acusaciones, los responsables del centro volvieron a abrir sus puertas.
¿Cómo escaparon los 10 internos en anexo “Gritos de libertad” en Guadalupe?
Durante la mañana del lunes 16 de septiembre, 10 internos del centro de rehabilitación “Gritos de Libertad”, se escaparon del lugar, aprovechando la distracción de los trabajadores debido a un conato de violencia al interior de lugar.
Las personas decidieron salir por la ventana del primer piso para saltar a una altura de aproximadamente cuatro metros. Entre ellos un hombre identificado como Jorge, quien resultó con una fractura en su pierna derecha. Una vez que fue atendido, sus familiares decidieron regresarlo al anexo.
Niegan denuncias de abuso en Centro de rehabilitación en Guadalupe, Nuevo León
Las condiciones de los centros de rehabilitación en México han sido un tema de preocupación, ya que en ocasiones se han reportado diferentes situaciones de violencia física y psicológica contra los internos. Incluyendo la falta de atención médica o negligencias.
Sin embargo, el subdirector del anexo, Alan Hernández, informó que las acusaciones del supuesto abuso dentro de las instalaciones en el municipio de Guadalupe son falsas, incluso culpó a los internos de querer manipular a sus familiares para lograr salir.
Aseguran que sus métodos, dentro del anexo “Gritos de libertad”, no son agresivos, sino al contrario, para lograr una desintoxicación utilizan formas naturales, sin medicamentos de por medio.
A pesar de que las acusaciones fueron desmentidas, la población del anexo disminuyó drásticamente. De los 90 internos que había, solo 25 permanecen, ya que muchos abandonaron el lugar debido a las denuncias de violencia, mientras que otros fueron retirados por sus familiares.