Guadalajara, 18 de junio.- Debido a que casi todos los niños y jóvenes mexicanos sobredotados no son detectados y por falta de ese diagnóstico son segregados y objeto de bullying, piden a quienes sean las próximas autoridades del país mayor atención a este sector vulnerable de la población.
Estadísticamente se calcula que el tres por ciento de la población infantil tiene sobrecapacidad, lo que equivaldría a cerca de un millón de niños en México. Sin embargo, no son identificados desaprovechando sus capacidades para el propio desarrollo del país.
En entrevista, Andrew Almazán, quien es considerado “el niño genio mexicano” por Discovery Channel, señaló que por lo regular los niños sobredotados son mal diagnosticados porque se les llega a considerar con Síndrome de Déficit de Atención o malos estudiantes.
“En México existe talento, existen los niños sobredotados y parte de la necesidad que se busca por medio del trabajo con el gobierno es que se reconozca que esta minoría existe, y se les puede dar el estatus de minoría vulnerable, porque son niños que en las escuelas son discriminados”, enfatizó.
Añadió que en las escuelas del país no existen espacios educativos para atender a los niños y jóvenes sobredotados, además, ni siquiera existe un día dedicado a este sector. “Hay una iniciativa para que el 30 de mayo sea el Día de los Sobredotados”.
Pidió que el próximo gobierno de México reconozca a los menores sobredotados como una minoría vulnerable conformada por más de un millón de niños en el país, con el propósito de que sea más fácil su atención en las escuelas promedio.
Por su parte, Juan Carlos Chávez González, de 15 años de edad y diagnosticado con un IQ superior a los 130 puntos, pidió a quien vaya a ser el próximo presidente de México mayor apoyo a los niños sobredotados.
“Como niños sobredotados necesitamos más apoyo, hay muy poco apoyo por parte del gobierno necesitamos más, hay muchos niños que están por diagnosticar y no tienen posibilidades económicas, sería importante por ejemplo un sistema de becas”, detalló.
Andrew Almazán es director de investigación y psicología del Centro de Atención al Talento (CEDAT), organismo que desde el año 2000 trabaja en la búsqueda y desarrollo de niños sobredotados en la Ciudad de México y que en Guadalajara tiene dos años con esa tarea.
Reiteró la importancia de que se atienda de manera más adecuada a este sector de la población, ya que los niños sobredotados, por ser diferentes a la media, son segregados y corren el riesgo de llegar a tener una baja autoestima en el área académica.
Además, recalcó que la sobredotación se pierde si no tiene un tratamiento oportuno y adecuado, de tal forma que los niños que no sean diagnosticados con esta condición tienen el riesgo de desaprovechar y perder sus capacidades.
Agregó que el CEDAT parte de la convicción de que un niño con sobrecapacidad tiene el derecho a ser un estudiante de excelencia académica y lo único que requiere es la ayuda y orientación de especialistas.