Desde el pasado 15 de enero que trascendió la movilización de “Caravana Migrante 2020”, integrada por un promedio de dos mil personas, la Comisión Nacional de Derechos Humanos acompaña a quienes forman parte de este grupo.
El 18 de enero se conoció que la caravana, que partió de la ciudad de San Pedro Sula, Honduras para llegar hasta Estados Unidos cruzando por Guatemala y México, arribó precisamente a las ciudades de Tecún Umán y El Ceibo en el país guatemalteco.
Los migrantes pretendieron ingresar a México por el Puente Internacional “Rodolfo Robles”, en Ciudad Hidalgo, Chiapas, y por Tenosique, Tabasco.
La CNDH recibió información que las autoridades mexicanas no permitieron el ingreso de forma masiva sino que brindaron indicaciones para ingresar por grupos de veinte personas.
Una vez que las personas migrantes comenzaron a arribar en grupos, la CNDH ha instruido estrecha vigilancia para que las autoridades mexicanas brinden la atención que requieren los miembros de la Caravana Migrante con especial énfasis a grupos en situación de vulnerabilidad.
La presidenta del organismo, María del Rosario Piedra Ibarra, afirmó que existe conocimiento y atención de la evolución de los acontecimientos y de la observancia del respeto irrestricto de los derechos humanos.
