Vaya manera de terminar la primera semana del año. No bastó con todo el desastre de Culiacán, sino que el 7 de enero despertamos con la lamentable noticia del choque de dos trenes en la Línea 3 del Metro, en la Ciudad de México.
El saldo de la tragedia en el Metro de CDMX: 59 heridos y una mujer fallecida.
Ella, una joven llamada Yaretzi Hernández, estudiante de Artes Visuales en la UNAM, que por la negligencia de unos, su vida, sus sueños y sus planes, se han interrumpido para siempre.

No es el primero, esperemos que sea el último; se le debe dar mantenimiento al metro
Si fuera la primera vez, seguramente diríamos “es un caso aislado”, sin embargo, el accidente ocurrido entre las estaciones La Raza y Potrero, es el tercero con fallecimientos en lo que va de esta administración, y el cuarto en toda la historia del Sistema de Transporte Colectivo Metro.
Por más que intento, no logro encontrar una explicación para el afán de no darle mantenimiento a este servicio necesario en la vida de miles de capitalinos. Y digo afán porque ni por falta de dinero ni de tiempo es que el Metro se cae a pedazos. Ya que si hay presupuesto para ofrecer conciertos gratuitos o espacio para visitar otros estados y “platicar” de las políticas exitosas del gobierno, claro que hay recursos para darle su manita de gato al Metro.
A lo que sucedió en la #Línea3 del #MetroCDMX no se le puede calificar de forma ramplona como "un accidente".
— Fuerza Informativa Azteca (@AztecaNoticias) January 10, 2023
Hay una serie de antecedentes que pudieron incidir en el choque.
Una nota de @DiegoBorbollaTV pic.twitter.com/FqNycZctp7
¿Qué pasa realmente en el Metro de CDMX?
No solo basta con que las autoridades pongan una cara triste ante los hechos y se “solidaricen” con las víctimas.
Se necesitan frutos verdaderos, mismos que, al parecer, no llegarán pues en vez de mantener o aumentar el presupuesto de mantenimiento para el metro, se disminuyó un 17.6% en los últimos 4 años. ¿Entonces, realmente ha habido un diagnóstico acertado para aplicar la mentada “austeridad republicana”?
Pensando en el bien del pueblo ¿por qué recortar el mantenimiento al Metro?
No sirve de nada recortar gastos con el objetivo de combatir la corrupción, si los encargados de dar mantenimiento al Metro, en este caso, no se lo dan. Porque no solo se trata de los lamentables accidentes con muertes, sino que día a día no falta el vagón al que no le cierran las puertas, que echa chispas o al que se le va la luz. Dejemos de normalizar esta estética decadente ya que implica un riesgo mortal para todos los usuarios, quienes tienen todo el derecho a viajar en un transporte digno.
En estos tiempos en la Ciudad de México, ¿con qué confianza una persona que va rumbo a su trabajo, a la escuela o a divertirse, puede tomar el Metro, sin pensar que puede perder la vida en su traslado?
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Ya no basta solo con cuidarse de los carteristas y asaltantes dentro del transporte público, ahora uno debe ir con “el Jesús en la boca” esperando no salir lesionado ni morir en el camino. Es la ruleta rusa cotidiana para los casi 100 mil usuarios del Metro. Díganme ustedes, ¿qué clase de vida es esta?
Pocas cosas más sabias que darle el tiempo justo a cada cosa en este mundo. Y este es tiempo de darle mantenimiento a una ciudad con metros colapsando, baches que más bien son socavones, y calles atascadas de basura. No es tiempo de campañas.
0 y van 3 en dos días en el Metro CDMX.
— Simón Levy (@SimonLevyMx) January 10, 2023
Ahora en Neza.
Impactante.pic.twitter.com/KQpZg5pVx8