Una mujer estaba muy molesta con su cuñada porque se acostó con su esposo. Esta mujer los encontró en un baile y comenzó a agredir a su cuñada. Una vez que la tuvo en el piso, su esposo comenzó a defender a su cuñada y terminaron arrestados por la pelea. Aunque ella le dijo a su hermano cómo encontró a su esposo y a su cuñada, él ha decidido no creerle nada.
La cuñada de esta mujer dijo que no tenía la culpa de lo que sucedió. Aceptó que sí se acostó con el esposo de su cuñada, pero que ella fue la que lo obligó a buscarla porque era una fodonga. Además, la cuñada también le dijo fodongo y flojo a su pareja por no defenderla y no ayudarle en casa. Incluso reveló que mantenía una relación con el esposo de su cuñada.
El esposo de la mujer engañada quiso defenderse diciendo que sabía y entendía su error de serle infiel. Pero también quiso culpar a su esposa por su propia infidelidad, diciendo que si ella no se hubiera descuidado y sí se arreglara bien, él no habría tenido que buscar a su cuñada para tener relaciones sexuales.
El hermano de la mujer engañada se enteró de la infidelidad de su mujer. A pesar de escuchar todo lo que pasó, le echó la culpa al esposo de su hermana y dijo que él es el que debería irse de su casa. En todo momento trató de defender a su esposa, aunque ella haya dicho que ya ni siquiera le servía en la cama.
Otro de los pretendientes de la cuñada fue la sorpresa para todos. Él sabía que era casada, pero desconocía que también tenía una relación con el esposo de su cuñada. A pesar de todo, él dijo que sí la quería y que se la quería llevar a su casa para darle todo lo que los otros dos hombres no podían.