El agua con sal suele ser tomada por aquellos que desean hidratarse tras una larga exposición a la actividad física o la pérdida importante de minerales y electrolitos, aunque expertos en la materia han revelado que no es una práctica positiva y que, al contrario de lo que muchos piensan, puede tener graves consecuencias en la salud.
Esto pasa si bebes mucha agua con sal
Expertos en materia de salud han compartido que tomar agua con sal no es una práctica saludable como muchos pueden pensar, y que incluso es posible que se tengan varias consecuencias negativas en la salud si se ha realizado de manera constante o si la persona ya tiene padecimientos que supongan mayor riesgo con el consumo de este mineral.
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Uno de los efectos menos dañinos, pero igual de incómodo, es la irritación estomacal, la cual ocasionará malestar y ardor e incluso podrá inducir el vómito, además de que puede causar un fuerte desequilibrio de nuestro microbiota intestinal.
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Por otro lado, a pesar de que muchos consideran que el agua con sal es un ‘remedio’ para hidratarse, médicos explican que puede suceder lo contrario ya que si tu cuerpo recibe una mayor cantidad de sodio de la que está diseñado para procesar sufrirás de una deshidratación, por lo que es mejor beber agua natural.
Para aquellas personas que sufren de presión arterial elevada, el consumo de sal les afectará de manera negativa aumentando aún más los valores que comúnmente se registran y maximizando el riesgo de problemas graves de salud, ya que este mineral está contraindicado para personas con problemas en las arterias.
Muchos no lo saben, pero la sal se encuentra asociada con la retención de líquidos, ese proceso que hace ver a nuestro cuerpo hinchado y aumentar de peso. Además, tomar agua mezclada con este mineral también podría ocasionar daño a nivel de los riñones, como cálculos renales o perder calcio por medio de la orina.