¡El sur de Texas está en la cúspide de una revolución energética! En un giro sorprendente, se ha identificado una reserva impresionante de hidrógeno verde en el área, una fuente de energía limpia que promete reemplazar al petróleo. Este descubrimiento no solo es emocionante, sino que también coloca a la región en el centro de la innovación energética global.
El proyecto en cuestión, conocido como Hydrogen City, es el más ambicioso del mundo en términos de producción de hidrógeno verde. La clave del éxito radica en el domo de sal de Piedras Pintas, una formación geológica única ubicada al sur de Texas.
Hydrogen City planea utilizar esta reserva para crear una fuente inagotable de energía limpia, lo que podría reducir significativamente la dependencia de los combustibles fósiles. Según los expertos, este avance no solo tiene el potencial de transformar la industria energética, sino que también podría generar numerosos empleos y estimular la economía local.
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¿Quién lidera el innovador proyecto y cómo podría transformar el futuro del petróleo en Texas?
El ambicioso proyecto de producción de hidrógeno verde está liderado por Green Hydrogen International (GHI) y tiene una empresa con sede en Houston fundada por Brian Maxwell. Este esfuerzo cuenta con el respaldo de Inpex Corporation de Japón y ABB, el gigante sueco-suizo en equipos industriales.
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Se espera que produzca 280,000 toneladas de hidrógeno anuales, lo que permitirá generar un millón de toneladas de amoníaco verde para exportación, especialmente a Asia. La construcción comenzará en el 2026, con la meta de iniciar la producción comercial en el 2029, por lo que utilizará un electrolizador de 2.2 GW alimentado por energía solar y eólica.
El proyecto aprovechará el domo de sal de Piedras Pintas, que puede almacenar hasta 6 teravatios-hora (TWh) de energía. Este almacenamiento prolongado podría transformar la gestión energética en industrias que dependen del amoníaco. El principal desafío es mantener una hidrólisis sostenible debido al alto costo energético de la electrólisis de agua.
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Para mitigar este desafío, se comprará electricidad a ERCOT durante las horas valle, lo que equilibrará la generación y reducirá costos. Si tiene éxito, este proyecto no solo cambiará la industria energética texana, sino que también podría establecer un nuevo estándar para la producción de energía limpia a nivel global. ¡Un futuro más verde está a la vista!
