La situación de la atención médica infantil en Florida ha generado preocupación, ya que el programa Florida KidCare, diseñado para brindar cobertura de salud a niños, ha expulsado a un número significativo de beneficiarios en lo que va del año 2024.
Con un promedio de más de 1,500 expulsiones por mes, esta cifra supera las cancelaciones registradas en el 2023, lo que plantea serios interrogantes sobre el acceso continuo a la atención médica de estos niños.
Los representantes demócratas de la Cámara de Representantes de Florida han levantado una voz de forma unánime contra lo que consideran un despojo ilegal de atención médica por parte del gobernador Ron DeSantis hacia miles de menores provenientes de hogares de bajos ingresos.
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Los legisladores demócratas en Florida apuntan contra Ron DeSantis
En una carta enviada a los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid (CMS), los legisladores demócratas han expresado su preocupación por la cancelación de más de 22,500 niños del programa Florida KidCare desde el 1 de enero. Este programa, una versión del Programa de Seguro Médico para Niños (CHIP, por sus siglas en inglés) a nivel estatal, es financiado conjuntamente por fondos federales y estatales.
La carta insta al organismo gubernamental a rechazar una propuesta de nueva estructura de primas presentada por el gobernador de Florida, la cual describen como “punitiva” y que, según los legisladores, resultaría en la salida de miles de niños del seguro de salud, y contradice el propósito de la ley.
La semana pasada, el gobierno impugnó en un tribunal federal de Tampa la validez de la ‘cláusula de elegibilidad continua’, una disposición incluida en la ley de asignaciones consolidadas del 2023 que garantiza 12 meses de cobertura en el seguro de salud infantil si se realiza al menos un pago de prima. DeSantis argumenta que la cláusula de elegibilidad continua convierte a CHIP en un programa de asistencia social que anula una ley estatal que requiere el pago mensual de primas.
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La representante demócrata de Florida, Kathy Castor, encabezó el grupo que redactó la carta, expresando en un comunicado que “el gobernador DeSantis y el estado de Florida han despojado injustamente a 22,500 niños de la atención que necesitan, siendo el único estado del país que lo hace”.
Castor busca que las agencias gubernamentales intervengan “para evitar que el gobernador Ron DeSantis y el estado de Florida eliminen la cobertura médica de decenas de miles de niños que actualmente dependen del Florida KidCare”.
En una entrevista con The Guardian, ella señaló que las expulsiones del Florida KidCare han generado “una crisis enormemente cruel e insensible” por parte del gobernador y del estado de Florida, “que están dispuestos a sacrificar a niños enfermos por sus objetivos políticos”.
