No es verdad, Packers no es el equipo sin dueño, más bien es el equipo sin único dueño. Resulta irónico que una ciudad como Green Bay que apenas rebasa los cien mil habitantes, sea el hogar del único equipo profesional de Estados Unidos que no pertenece a un multimillonario o a una corporación millonaria. Los Packers pertenecen al pueblo.
Más específicamente, los Packers pertenecen a 360 mil dueños. Esa es la cantidad de accionistas que tiene el equipo de Green Bay. Pero contrario a lo que uno pudiera pensar, todos estos accionistas no tienen beneficios económicos, tampoco reciben entradas, lo único que obtienen, es el orgullo de formar parte de esta gloriosa franquicia que ha ganado cuatro veces el Super Bowl.
“Aunque eso no te da un derecho especial de voto, o participación en el capital, ni asiento preferencial, ni un lugar en el avión del equipo, te da mucho orgullo”, dijo Rick Horrow uno de los accionistas a la BBC. Cómo usted imaginará, sería un poco complicado reunir a los 360 mil dueños cuando hay que tomar decisiones o cuando hay que asistir a una junta de dueños de la NFL, es por ello que los accionistas formaron un consejo en el cual se eligen a 45 representantes y entre esos 45 toman las desiciones pesadas del equipo, delegando a un presidente que es el representante del equipo ante la liga y que es el único accionista que es remunerado.
A pesar del mercado tan pequeño en el que se encuentran los Packers, este año Forbes lo colocó como el equipo 27 en su lista de más valiosos del mundo, con un valor estimado de más de dos mil millones de dólares. Una franquicia que anualmente, gana más de 400 millones de dólares y que no pertenece a un dueño obliga a preguntar ¿qué pasa con esas ganancias? La respuesta vuelve a ser la misma: el pueblo.
Desde hace años, el consejo de Packers decidió que todas las ganancias serán usadas para remodelar, dar mantenimiento y pagar sueldos del personal operativo del equipo, el restante anteriormente se daba a los veteranos de guerra, pero desde hace varios años, decidieron cambiar y donarlo todo a la caridad a través de la fundación del equipo.
Es por ello que la afición de Packers es mucho más que solo una afición. Lo que ellos tienen es un sentido de identidad. Es el equipo que más aficionados mete a su estadio anualmente, de hecho hay una lista de espera de casi 80 mil personas para adquirir abonos para el estadio. Una lista a la que habría que inscribirse en los primeros años de vida, pues disminuye apenas mil personas cada año y como los abonos se pueden heredar, hay familias que nunca han dejado ir el privilegio de contar con boletos para ver a sus Packers.
Pedro Antonio Domínguez @pedrodomg
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