Olivia lleva 38 años con su negocio en Cuernavaca, Morelos. Ante el furor que ha causado la película Barbie decidió darle un toque rosa a sus tlacoyos.

También hay quesadillas, sopes y gorditas en color rosa. Olivia se dice fan no solo de la cocina mexicana, sino también de esta muñeca.

Las primeras sorprendidas con estos antojitos mexicanos inspirados en Barbie son las niñas. Y también las mamás de las niñas, sobre todo cuando le acompañan con las tradicionales salsas verde y roja.

Para lograr el color rosa de la comida, la masa se pigmenta con betabel, aunque un poco rebajado para que no predomine su sabor. Además de la masa, también prepararon aguas frescas color rosa, esas pigmentadas con colorante vegetal.