México enfrenta una grave emergencia sanitaria y ambiental tras la detección de 390 nuevos brotes de gusano barrenador del ganado (Cochliomyia hominivorax), plaga que ya no solo afecta a bovinos, ovinos, porcinos y equinos, sino que se ha expandido a humanos, perros, fauna silvestre y, por primera vez, a aves domésticas.
Detectan primer caso de gusano barrenador en aves
El gusano barrenador es una larva que invade heridas abiertas de animales y humanos, alimentándose de tejido vivo. De acuerdo con el reporte de la Organización Mundial de Sanidad Animal (WAHIS), con fecha del 4 de junio de 2025 en México se han registrado 390 nuevos brotes y, por primera vez, se ha documentado la presencia de este parásito en aves de corral, específicamente en cinco gallinas de traspatio en Tabasco.
Se confirmó también el primer caso en fauna silvestre, en un gavilán común (o aguililla caminera, Buteo magnirostris) en Tabasco. El ave fue encontrada con larvas en el ala derecha y recibió tratamiento veterinario. Además, uno de los casos involucró a un pollito de 10 semanas con miasis en el oído, lo que confirma que la plaga ya afecta a las aves de corral en el sureste del país.

Gusano barrenador en humanos brotes y medidas de contención
Aunque el riesgo para humanos es considerado bajo, se han confirmado ocho casos de miasis en personas, en los estados de Chiapas y Campeche, principalmente en adultos mayores con heridas expuestas.
Las autoridades han intensificado la vigilancia y el reporte de casos en coordinación con organismos como SENASICA, SEMARNAT y la Organización Mundial de Sanidad Animal (WAHIS). A la par, se han implementado acciones de desinfestación, restricción de movimientos, tratamiento médico y trazabilidad en las zonas afectadas
¿Cómo detectar al gusano barrenador? Las señales de alerta
El gusano barrenador se detecta por heridas abiertas con secreción maloliente y larvas blancas visibles que se mueven dentro. Los animales muestran depresión, fiebre y aislamiento. Revisar heridas y comportamiento es clave para la detección temprana y evitar daños graves, así como consultar un veterinario ante la sospecha.