¿Cómo es un anexo? Mujer describe el terror de los centros clandestinos

Uno de los sitios con mayor intriga en las personas tiene que ver con los centros de rehabilitación para drogas y alcohol, conocidos también como El Anexo, en donde miles de jóvenes y adultos son ingresados con el objetivo de dejar el problema de adicción a alguna sustancia.

A pesar de que en muchas personas el anexo es un sitio del que no se habla abiertamente, es importante difundir los peligros y tipos de centros que hay en México y el mundo. Por ese motivo, en la última edición de Bitácora AM, Geraldine Aragón profundiza en el terror que esconden los anexos clandestinos, así como las diferencias respecto a sitios reconocidos.

Para ello entrevistó a Mónica, una joven que fue ingresada por la fuerza a un anexo clandestino, donde vivió auténticas jornadas de tortura, bajo la excusa de estarse rehabilitando, pero que en realidad son sitios que se dedican a hacer sufrir a los internos. Motivo por el que exhorta a cualquier persona o familiar, a buscar centros reconocidos para una correcta rehabilitación.

Para ejemplificar cómo debe funcionar un anexo, Geraldine habló con Ángel Prado, director de operaciones de Centros de Integración Juvenil, un anexo que se autodenomina como la principal institución en México y América Latina para la rehabilitación del uso de sustancias, quien empezó explicando cómo inicia este proceso.

“La primera fase es el establecimiento del diagnóstico. La segunda fase es que la persona reconozca o acepte que tiene un trastorno. (...) Durante ese tiempo se está haciendo intervenciones médicas psiquiátricas”, informó Prado para Fuerza Informativa Azteca (FIA).

Uno de los puntos más importantes tiene que ver con la manera en dirigirse a una persona que es víctima de la adicción de alguna sustancia, especialmente para orientarla a inscribirse voluntariamente a un Centro de Rehabilitación, comúnmente conocido como anexo.

“Es muy importante acercarse a las personas que están consumiendo sustancias, pero de ninguna manera con una actitud de juicio, con una actitud de castigo o severa...”, explica Ángel Prado para FIA, con el objetivo de saber cómo te debes de acercar a una persona con necesidad de rehabilitación.

“Hay que acercarse en una situación empática e invitar a esa persona a que acuda a un servicio de atención profesional. En caso de que no quiera, es muy importante que se acerque la familia. Con un experto se puede diseñar una estrategia para que finalmente acepte con ir a tratamiento.”

De igual forma, fue específico en decir que el ingreso debe ser voluntario. Una vez dentro, se firma el consentimiento voluntario y se le asegura que puede salir cuando así lo desee. Esto es clave para evitar cualquier tipo de abuso o sufrimiento durante este periodo de lucha.