Jóvenes en el país son reclutados por cárteles. Reciben órdenes para hacer la tarea sucia, una realidad que azota y enluta a familias al perder la vida estando al servicio del crimen organizado, ese que les arrancó su futuro.

Entre enero y marzo de este año murieron en México 211 mil 894 personas, 7 mil 133 fueron asesinadas, pero lo más alarmante es que 2 mil 35 de ellos eran jóvenes de entre 25 y 34 años. Hoy el homicidio en este rango de edad es la principal causa de muerte.

“Constata, refrenda esta realidad que se viene viviendo desde hace tiempo. Los grupos del crimen organizado reclutan a niños, jóvenes y adolescentes para actividades criminales y lamentablemente son la carne de cañón para la actividad delictiva”, comenta David Saucedo, consultor en seguridad.

Crimen organizado usa a jóvenes como sicarios, halcones o narcomenudistas

Jóvenes que son colocados por los criminales en la primera línea de batalla. “El periodo en el que transcurre su actividad, ya sea como sicarios, halcones o narcomenudistas es muy corto, en promedio se tiene que un joven que se incorpora a una actividad criminal tiene un lapso de colaboración con algún grupo del crimen organizado entre 4 y 8 años máximo”, dijo el especialista.

Jóvenes asesinados son reemplazados por el crimen organizado

Pero ese no es problema para un mercado que tiene el abasto garantizado. Joven que es asesinado, joven que es reemplazado de inmediato, y en el peor de los casos, desaparecido.

“Hay una reducción de acuerdo con las métricas del gobierno federal, una reducción de homicidios a nivel nacional, pero hay un incremento en el número de desapariciones, casi en la misma proporción”, señala David Saucedo.

Así que mientras en el discurso se repite una y otra vez que para disminuir la violencia se atienden las causas, la terca realidad se empeña en demostrar que los jóvenes se siguen enrolando en el crimen organizado al tiempo que firman su sentencia de muerte.