El juego de béisbol fronterizo es una tradición, entre las ciudades ubicadas en el límite de México y Estados Unidos, que comenzó durante la época de la Revolución. La actividad, en la que participan desde chicos y grandes, busca lanzar la bola para unir a los habitantes de Chihuahua, Nuevo Laredo y Texas en un mismo sitio, dejando claro que, las divisiones no existen.
México y Estados unidos reviven el juego de béisbol fronterizo
La cita fue este domingo 14 de abril, exactamente en la frontera entre México y Estados Unidos, donde convergen tres ciudades Chihuahua, Nuevo Laredo y Texas. Desde muy temprano, organizaciones de ambos lados comenzaban a calentar para dar inicio al juego más importante entre los habitantes de Juárez, El Paso y Sunland Park.
Entre las imágenes destaca cada participante, quienes con mucho respeto portan la bandera de su país en la camiseta y dan una cálida bienvenida a sus contrincantes. También se puede ir el himno de México y Estados Unidos, respectivamente.
La escena es simplemente conmovedora porque desde los más pequeños hasta los más grandes del hogar se reúnen en armonía para divertirse. Mientras, detrás de cámaras, observamos como toda persona que desee unirse puede hacerlo solo con recibir su guante, una bola y el bat: elementos que ayudarán a recodar el juego de béisbol fronterizo.
#Chihuahua | ¡Paren todo, que hay partido!⚾
— Fuerza Informativa Azteca (@AztecaNoticias) April 14, 2024
En la frontera se juega #béisbol entre #México y Estados Unidos.
Por medio del #deporte, borran la barrera entre ambos países.
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Tradición de béisbol fronterizo comenzó desde la revolución
El béisbol fronterizo, también conocido como “béisbol de la frontera” o “béisbol apache”, es una variante única del juego que se remonta a la época de la Revolución Mexicana, en 1910. En ese momento, las comunidades a menudo estaban divididas por lealtades políticas, con algunos apoyando al gobierno federal y otros al movimiento revolucionario.
Los partidos se jugaban con frecuencia en campos improvisados, utilizando pelotas y bates hechos a mano. Las reglas eran flexibles y a menudo se adaptaban a las preferencias de los jugadores locales; sin embargo, la esencia siempre fue la misma: dos equipos compitiendo entre sí en un campo de tierra, con el objetivo de anotar más carreras que el oponente.