Investigadores del Instituto Politécnico Nacional (IPN) comprobaron que el jugo de toronja protege contra daño testicular y mejora la fertilidad en hombres que trabajan en minas, galvanizadoras, así como fumadores, entre otros.
Comprobaron que la fertilidad de ratones de laboratorio mejoró notablemente después de administrarles durante 11 días consecutivos dosis controladas de jugo de toronja, el cual incrementó 90 por ciento la calidad de los espermatozoides y protegió su material genético.

El proyecto realizado por los científicos de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB), Isela Álvarez González, Eduardo Madrigal Bujaidar y David García García, comprobó el efecto protector contra el daño que causa el cloruro de cadmio, metal contaminante.
En la investigación se señala que las personas con exposición en minas, galvanizadoras, producción de cerámica y fabricación de baterías, entre otras, así como los fumadores, tienen mayor riesgo de acumulación de ese metal en el organismo; sin embargo, por encontrarse este contaminante en el ambiente, es posible que influya en el incremento del índice de infertilidad en la población.
Jugo de toronja para los problemas de fertilidad masculina
Por su alta concentración de antioxidantes, macro y micronutrientes, el jugo de toronja protege contra el daño que causa el cloruro de cadmio en los testículos. Al realizar diversos ensayos observaron que se evita el daño en el ácido desoxirribonucleico (ADN) de las células reproductivas.
Para realizar los experimentos conformaron seis grupos de roedores por 11 días, donde se les administró ciertas dosis de jugo de toronja. Al concluir el tratamiento se tomaron muestras de los espermatozoides contenidos en el epidídimo (estructura tubular en donde maduran y desde donde se trasladan a los testículos), se realizaron pruebas de calidad espermática que incluyeron la concentración celular, morfología (para evaluar anormalidades) y viabilidad o cantidad de espermatozoides vivos y muertos.

El cloruro de cadmio disminuyó 80 por ciento la viabilidad de los espermatozoides, mientras que mejoró 40 por ciento con la dosis de jugo equivalente a un vaso, en tanto que la dosis equivalente a cuatro vasos mejoró 90 por ciento la calidad.
Al realizar un ensayo de antigenotoxicidad para evaluar el estado del ADN después de estar expuesto al cloruro de cadmio, constataron que el jugo de toronja registró un efecto protector, pues de acuerdo con la cantidad de micronúcleos (fragmentos de cromosomas) presentes en las células, el material genético no sufrió alteraciones significativas.
Los especialistas de la ENCB recomendaron a las personas con problemas de infertilidad el consumo de una dieta equilibrada. Destacaron que, aunque los antioxidantes como los que contiene el jugo de toronja son benéficos para el organismo, se debe moderar su consumo.













