En medio de una nueva escalada de tensiones entre India y Pakistán en la disputada región de Cachemira, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se pronunció este miércoles sobre el conflicto que ya ha cobrado la vida de al menos 31 personas. Desde la Casa Blanca, el mandatario ofreció su disposición para mediar entre ambas potencias nucleares y evitar una mayor confrontación.
En declaraciones a la prensa, Trump reiteró su cercanía con los gobiernos de ambos países y expresó su deseo de que se detenga de inmediato la violencia.
“Es terrible. Mi postura es que me llevo muy bien con ambos países. Los conozco muy bien y quiero que lo resuelvan. Quiero que pare, y ojalá puedan parar ya”, dijo el mandatario de EU.
¿Por qué la India y Pakistán están en conflicto?
La región de Cachemira ha sido foco de conflicto entre India y Pakistán durante décadas. En los últimos días, se han intensificado los enfrentamientos con ataques aéreos, bombardeos y múltiples bajas civiles. La comunidad internacional observa con preocupación este repunte de violencia, en especial por el riesgo de una escalada militar entre dos naciones con capacidad nuclear.
Trump, quien retomó la presidencia de Estados Unidos en 2025, destacó que mantiene buenas relaciones con ambos gobiernos y que su administración está preparada para colaborar en cualquier iniciativa diplomática que contribuya a desactivar el conflicto.
“Nos llevamos muy bien con ambos países. Tenemos buenas relaciones con ambos, y quiero que esto acabe. Y si puedo hacer algo para ayudar, estaré ahí”, subrayó.
#Impactante | Nueve lugares en #Pakistán fueron atacados por #India como respuesta a los recientes atentados --> https://t.co/NnbUW9spZE pic.twitter.com/2SEqaLVzQI
— Fuerza Informativa Azteca (@AztecaNoticias) May 7, 2025
Estados Unidos y su papel estratégico en Asia
El gobierno estadounidense ha sostenido históricamente una posición de neutralidad activa en los conflictos entre India y Pakistán, pero con constantes llamados al diálogo y la moderación.
Expertos internacionales han señalado que la mediación estadounidense podría ser clave para evitar una guerra de mayores proporciones, aunque también advierten que cualquier intervención debe ser cuidadosamente coordinada para no alterar la soberanía de los involucrados.
La declaración del presidente Donald Trump en 2025 marca un nuevo intento por posicionar a Estados Unidos como un actor central en la resolución de conflictos internacionales, en un contexto global marcado por inestabilidad y amenazas persistentes.