Realizar actividad física, que ayuda a mejorar la memoria en ocasiones , en ayunas puede aumentar la quema de grasa, mejorar la eficiencia energética y activar procesos celulares como la autofagia, aunque también podría provocar fatiga, mareos o un menor rendimiento si no se realiza bajo ciertas condiciones. Además, hay efectos que dependen del tipo de entrenamiento, del estado físico y de la alimentación del día anterior.
¿Qué efectos tiene hacer ejercicio en ayunas según la ciencia?
Estudios de la Universidad de Harvard , explican que entrenar antes del desayuno puede elevar la oxidación de grasas, debido a que el cuerpo recurre a estas reservas como fuente de energía ante la ausencia de glucosa disponible. Este fenómeno, conocido como lipólisis, es uno de los principales argumentos a favor del entrenamiento sin ingesta previa.

También se ha vinculado esta rutina con una mayor activación de procesos como la autofagia celular, útil para eliminar proteínas dañadas y favorecer la regeneración de tejidos. En ciertos casos, podría mejorar la respuesta del organismo ante el esfuerzo prolongado, sobre todo si se acompaña de una nutrición planificada desde la cena anterior.
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No obstante, los especialistas advierten que, en sesiones de alta exigencia, el ayuno podría limitar la intensidad o prolongar el tiempo de recuperación. Las señales de alerta incluyen sensación de debilidad, dolor de cabeza o disminución del rendimiento aeróbico, lo cual varía según el tipo de actividad realizada.
¿Es recomendable hacer ejercicio en ayunas si no se tiene experiencia previa?
Expertos en nutrición deportiva y fisiología coinciden en que esta estrategia no es adecuada para personas sedentarias o sin entrenamiento regular. En individuos sin adaptación previa, la falta de alimento antes de ejercitarse puede ocasionar descompensaciones, especialmente si se practica sin supervisión.
En ese grupo, los riesgos van desde mareos y náuseas hasta cuadros de hipoglucemia. Por esa razón, se sugiere iniciar con entrenamientos suaves tras una ingesta ligera, y solo considerar el ejercicio en ayunas como parte de un protocolo estructurado.