Rigoberto Gutiérrez Treviño, de 41 años, era el chofer de la pipa de gas LP que explotó en Escobedo, Nuevo León. Él después de estrellar el vehículo en una vivienda, se bajó para alertar a los vecinos de la zona y que evacuaran sus domicilios, cuando volvió a la unidad en llamas fue que ocurrió la explosión envolviéndolo y dejándolo atrapado entre las llamas.
Luego de permanecer dos días internado en el hospital de zona número 21 del Instituto Mexicano del Seguro Social, los médicos informaron a su familia su deceso la tarde del miércoles 09 de Agosto, tras las graves quemaduras que sufrió en el 95 por ciento de su cuerpo.
Pero lo que hizo Rigoberto, para ayudar a salvar vidas, será recordado como un acto de heroísmo.
En las imágenes de una cámara de seguridad, se ve el actuar de Rigoberto después del accidente en la Colonia Lomas de San Genaro, en el video se ve a Rigoberto Gutiérrez bajando de la unidad y de inmediato se aproxima a las viviendas para evacuar a los vecinos por el riesgo de una explosión.

El director de bomberos de Nuevo León, Alejandro Zuñiga dijo ante las cámaras de Fuerza Informativa Azteca: “ese evento a todos nos causó una gran conmoción, es digno de reconocerse lo que hizo ese operador al estar alertando a los vecinos de donde sucedió el accidente prácticamente evacuando a los más próximos.”
Cuando Rigoberto Gutiérrez regresó hacia la parte posterior de la pipa posiblemente para cerrar la válvula de emergencia del suministro sobrevino el estallido y el fuego lo atrapó.
Alejandro Zuñiga, director de bomberos de Nuevo León continuó con su declaración: “había una fuga ya grande en el área y había fuego en la pipa era cuestión de segundos para esto sucediera, es probable que el chofer o el operador haya querido aplicar la válvula de cierre de emergencia.”
Los vecinos reconocieron su valor para ayudarlos a salir de la zona de peligro.
Rigoberto Gutiérrez, vivía en la Colonia Felipe Carrillo Puerto en el municipio de Escobedo, Nuevo León. Con su pareja concibió a tres hijos, que hoy han quedado en la orfandad, sin un padre que ya no los podrá verlos crecer y pasar momentos maravillosos. Sus tres hijos se quedaron sin la protección de su héroe sin capa.