Conforme al más reciente experimento de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA por sus siglas en inglés), revela que los vehículos espaciales del tipo rover, tendrán que excavar unos dos metros bajo suelo en Marte o más profundo para encontrar signos de vida antigua.
Esto se debe en gran medida a que la radiación ionizante del espacio degrada moléculas pequeñas como los aminoácidos y lo hace relativamente rápido.
Aunque estos aminoácidos pueden ser creados por la vida y por la química no biológica, encontrar ciertos aminoácidos en Marte se consideraría un signo potencial de vida antigua porque son ampliamente utilizados por la vida terrestre como componente para construir proteínas.
Cabe señalar que las proteínas son esenciales para la vida debido a que se utilizan para fabricar enzimas que aceleran o regulan las reacciones químicas, además de para formar estructuras.
Here’s a zoomed-out view with the feature circled. ⭕ In it, you see a small crevice (>30 cm tall) between 2 fractures in a rock. There are several linear fractures in the mound - but in this spot, several fractures intersect, which allowed the rock to break at such sharp angles. pic.twitter.com/0yHEy1wIfi
— Curiosity Rover (@MarsCuriosity) May 18, 2022
Científicos sugieren misiones de mayor profundidad en Marte
Alexander Pavlov, miembro del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA, ha señalado que: “Nuestros resultados sugieren que los aminoácidos son destruidos por los rayos cósmicos en las rocas y el regolito de la superficie marciana a un ritmo mucho más rápido de lo que se pensaba”.
Conforme a las actuales misiones, un vehículo espacial del tipo rover, perfora hasta unas dos pulgadas (unos cinco centímetros) de suelo en Marte. Pavlov asegura que: “A esas profundidades, se necesitarían solo 20 millones de años para destruir los aminoácidos por completo. La adición de percloratos y agua aumenta aún más la tasa de destrucción de aminoácidos”.
Cabe señalar que un período de 20 millones de años es una cantidad de tiempo relativamente breve porque los científicos están buscando evidencia de vida antigua en la superficie de Marte que habría estado presente hace miles de millones de años, cuando el “Planeta Rojo” era mucho más parecido a la Tierra.
En el artículo publicado en Astrobiology, Alexander Pavlov, señala que: “Las misiones con muestreo de perforación superficial tienen que buscar afloramientos expuestos recientemente, por ejemplo, microcráteres recientes con edades inferiores a 10 millones de años o el material expulsado de dichos cráteres”. Lo anterior sugiere una nueva estrategia de búsqueda para misiones que se limitan al muestreo a poca profundidad.
Join AACC’s Super Science Club for an Astronomy Café including a presentation from Dr. Alexander Pavlov of @NASA’s Goddard Space Flight Center. The event will be hosted in the Student Union Building cafeteria on AACC’s Arnold campus from 7:30-8:30pm. See you there! pic.twitter.com/71HaJ59zqS
— Campus Current (@campus_current) May 14, 2022
Rayos cósmicos destruyen aminoácidos en Marte, signo potencial de vida antigua
Los rayos cósmicos son partículas de alta energía generadas por eventos poderosos en el sol y en el espacio profundo, como erupciones solares y estrellas en explosión. Pueden degradar o destruir moléculas orgánicas cuando penetran metros en una roca sólida, ionizando y destruyendo todo a su paso.
La atmósfera de la Tierra y el campo magnético global, protegen a la superficie de nuestro planeta, de la mayoría de los rayos cósmicos. En su juventud, Marte tenía características similares a las de Tierra, sin embargo perdió la protección a medida que envejecía.
Hay evidencia de que hace miles de millones de años, la atmósfera más espesa permitió que el agua líquida persistiera en la superficie de Marte. Debido a que el agua líquida es esencial para la vida, científicos quieren saber si algún tipo de vida surgió en Marte y buscan evidencia de vida marciana antigua mediante la examinación de las rocas del “Planeta Rojo”, por lo que buscan moléculas orgánicas como los aminoácidos.
Alexander Pavlov, miembro del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA, señala que “nuestro trabajo es el primer estudio exhaustivo en el que se estudió la destrucción (radiólisis) de una amplia gama de aminoácidos bajo una variedad de factores relevantes para Marte (temperatura, contenido de agua, abundancia de perclorato) y se compararon las tasas de radiólisis”.
Brr, it’s cold out here. It must be winter in my hemisphere!
— Curiosity Rover (@MarsCuriosity) November 15, 2021
My REMS, or Rover Environmental Monitoring Station, gives daily weather reports and takes dust surveys to measure seasonal changes over time. It’s just one of many instruments used to study the Martian weather. pic.twitter.com/tgDDMZ1xWj