Muchas veces hemos escuchado que tener hábitos saludables pueden beneficiar al cuerpo humano y al bienestar emocional, pero ¿realmente sabes cuánto podría impactar en el tiempo de vida que tienes por delante? Incluso si los incorporas a tu rutina a los 40 o 50 años, podrías prolongar tu vida más de dos décadas.
Así lo dio a conocer un estudio inédito presentado el pasado lunes 24 de julio en la Asociación Americana por la Nutrición, en donde dieron a conocer el resultado tras evaluar a más de 700 mil personas, quienes estuvieron en posición para monitorear al ser veteranos militares, pero que para los fines de la investigación, resultaron ideales para concluir en la importancia de las buenas costumbres personales.
Son ocho hábitos principales los documentados por el estudio, los cuales pueden aumentar hasta 24 años la esperanza de vida, empezando a implementarlos en tu rutina a partir de los 40 años. Probablemente, ya habías escuchado de ellos, pero más adelante profundizamos sobre su impacto y lo que pasa si solo implementes unos cuantos.
¿Qué hábitos pueden aumentar el tiempo de vida?
- Hacer ejercicio
- Tener una dieta sana
- Reducir el estrés
- Dormir bien
- Fomentar relaciones sociales positivas
- No fumar
- No beber en exceso
- No volverse adicto a los opiáceos.
¡No te abrumes! Implementar solamente uno o dos de estos hábitos también impacta favorablemente en tu tiempo de vida, pues solamente hacer ejercicio diario podría aumentar hasta 4.5 años, motivo por el que Xuan-Mai Nguyen, autora principal del estudio, clasificó en orden cuáles benefician más al cuerpo.

Las claves para poder vivir muchos años
En primer hábito, y por ende el más importante, es el ejercicio. Tener esta costumbre diaria “disminuye el 46% en el riesgo de muerte por cualquier causa en comparación con los que no hacían ejercicio”, según informa el estudio difundido por CNN.
No volverse adicto a los opiáceos podría significar disminución de un 38%; mientras que no haber fumado nunca disminuye alrededor del 29% el riesgo de una muerte prematura.
En cuarto lugar se ubica una vida lejos del estrés, con 22% menos de probabilidades de sufrir una muerte prematura, seguido por una dieta basada en plantas (21%) y dejar de consumir alcohol en abundantes cantidades, como una borrachera o más de cuatro vasos diarios (19% menos).