Un hombre afroamericano pasó siete años en la cárcel tras ser condenado por un crimen que no había cometido, por ello, recuperó la libertad luego de que las autoridades determinaron que fue condenado por error.
Se trata de William Arnold, quien fue sentenciado a 25 años de cárcel tras haber sido declarado culpable de abusar sexualmente de un niño a quien ayudaba con las tareas.
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El niño relató a su mamá que había tenido un ataque por parte de William Arnold, por lo que la mujer lo acusó de ese delito. Sin embargo, más adelante se descubrió que se trataba de otro hombre con el mismo nombre, un adolescente y amigo de la familia de la víctima, quien admitió el crimen.
Arnold insistió en su inocencia, así que en 2020 un tribunal de apelaciones del estado de Tennessee revisó su caso determinando que había sido condenado por error.
Corte anuló condena que cumplía por error
Por ello, la corte anuló su sentencia y ahora ese hombre exige a las autoridades estatales su exoneración, así como una compensación por los años que pasó tras las rejas.
Sin embargo, la prensa local señala que “muy pocas personas en Tennessee son exoneradas y aún menos reciben algún tipo de compensación”.
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Mientras tanto, la defensa de Arnold sostiene que el sistema judicial de Estados Unidos cometió “uno de los errores más graves” con ese hombre.
Luego de esto, se presentaron dos quejas formales contra dos fiscales durante el juicio como excesivamente impropios, así como de haber hecho comentarios y mostrar comportamientos “incendiarios”.
