La aerolínea estadounidense Delta Airlines ha lanzado una seria advertencia sobre las posibles consecuencias económicas y operativas si la administración de Donald Trump impone nuevos aranceles a aviones y piezas importadas. Según la compañía, esta medida podría obligarla a dejar de adquirir aeronaves fabricadas en el extranjero y a eliminar rutas aéreas que transportan a aproximadamente 10 millones de pasajeros cada año.
Compras clave en riesgo por medidas proteccionistas
Durante 2023 y 2024, Delta ha recibido 47 aviones provenientes de Canadá, Alemania y Francia, tres países clave en la industria aeronáutica global. La compañía ha mantenido una estrategia de flota diversificada que incluye aeronaves de Airbus y Bombardier, fabricadas fuera de Estados Unidos. Estas adquisiciones han sido fundamentales para renovar su flota, aumentar la eficiencia energética y mejorar la experiencia del pasajero.
El secretario de Comercio de #EU, Howard Lutnick, dijo durante una audiencia en el #Senado que la Administración de #DonaldTrump está estudiando la posibilidad de imponer #impuestos a piezas de aeronaves fabricadas fuera del país.
— Fuerza Informativa Azteca (@AztecaNoticias) June 4, 2025
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Sin embargo, la posibilidad de que se impongan nuevos impuestos a estas importaciones bajo un eventual regreso de Trump a la presidencia preocupa profundamente a la aerolínea. Los impuestos no solo encarecería las adquisiciones futuras, sino que también impactaría directamente en la viabilidad de rutas internacionales y nacionales actualmente en operación.
Impacto directo para millones de pasajeros
Delta estima que los vuelos que podrían verse comprometidos por esta política comercial atienden a unos 10 millones de pasajeros cada año, lo que significaría una reducción importante en la conectividad aérea del país. Las rutas en riesgo incluyen conexiones entre ciudades medianas y destinos internacionales, muchas de las cuales dependen de los modelos específicos de aviones importados por la aerolínea.
Además del impacto para los consumidores, el freno a la compra de aeronaves extranjeras podría afectar la cadena de suministro aeroespacial, incluyendo mantenimiento, partes y servicios especializados que actualmente se desarrollan en colaboración con fabricantes europeos y canadienses.
El sector aéreo se mantiene con incertidumbre
La advertencia de Delta no es casual. Se da en el marco del debate de las políticas comerciales proteccionistas de Trump vuelven a ser tema de discusión. La aerolínea se suma así a otras grandes empresas que llaman a evitar medidas que puedan frenar la competitividad del sector aéreo y limitar opciones para los consumidores.
Mientras tanto, el sector aéreo permanece en incertidumbre, a la espera de definiciones que marcarán el rumbo del comercio y la conectividad global.