Una iniciativa legislativa en Jalisco está sacudiendo los cimientos del matrimonio tradicional. El diputado local del partido Hagamos, Enrique Velásquez, propuso permitir en la entidad los llamados matrimonios temporales, con una duración de entre dos y cinco años. Al concluir el plazo, las parejas podrán decidir si renuevan su vínculo o lo disuelven legalmente, sin pasar por un proceso judicial tradicional.
¿Por qué matrimonios con fecha de caducidad?
La propuesta nace como respuesta a las problemáticas legales que enfrentan parejas en unión libre, sobre todo al momento de una separación, fallecimiento o en disputas por la custodia de hijos y bienes. Velásquez señala que esta modalidad ofrece mayor certeza jurídica y evita las dificultades de demostrar el concubinato ante un tribunal.
“Cuando hay un conflicto, un deceso o un problema con los hijos, es complicado demostrar el concubinato. Las parejas terminan peleando por lo que construyeron juntos”, afirmó el legislador.
Además, esta figura podría aliviar la carga de trabajo de los juzgados familiares, donde los conflictos por divorcio son cada vez más frecuentes y prolongados.
Jalisco y el panorama actual del matrimonio
Según datos del INEGI para 2023, Jalisco tuvo una de las tasas más bajas de divorcios en el país, con 1.32 por cada mil habitantes mayores de 18 años aumentando 5.4% respecto al 2022. A pesar de ello, se registraron 7,961 divorcios, de los cuales el 60% fue por mutuo consentimiento y el 39% por divorcio incausado —disolución del matrimonio sin la necesidad de demostrar una causa específica o el consentimiento del otro cónyuge—, mostrando que muchas parejas aún recurren al sistema judicial para formalizar la disolución.
En cuanto a la duración del matrimonio en la entidad, el promedio es de entre 10 y 15 años, y solo un 18.7% de los divorcios ocurrieron antes de los 5 años de casados, justo en el rango que plantea la iniciativa para los matrimonios temporales.
¿Un cambio cultural o legal?
Aunque la propuesta aún se encuentra en análisis legislativo, ya genera debate social por sus posibles implicaciones culturales, legales y religiosas. De aprobarse, Jalisco podría convertirse en pionero nacional en ofrecer una alternativa moderna y flexible al matrimonio permanente, alineada con las nuevas formas de convivencia.
