CDMX En el Istmo de Tehuantepec, Oaxaca, se localiza el último tramo de tierra del supercontinente Pangea, que se separó hace 200 millones de años dando origen a los continentes actuales. Así lo sugieren investigaciones paleontológicas de la UNAM. En la zona se han descubierto fósiles afines con la fauna europea y no con la americana.
Esta conclusión fue posible gracias al estudio de los materiales que integran la Colección Nacional de Paleontología, que reúne 12 mil fósiles de vertebrados, invertebrados, plantas y huellas de todo el país, recolectados durante 130 años y resguardada por la UNAM.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) realiza el registro de fósiles de esta colección, para dar certeza jurídica a este patrimonio y garantizar su resguardo.