Usar bloqueador solar parece lo más básico del mundo. Lo aplicas, sales, y ya estás protegido… ¿no? Pues resulta que no. Uno de los errores más frecuentes —y que más se repiten— es ponérselo justo antes de salir, cuando ya se está en la puerta, con las llaves en la mano y el sol pegando de frente.
Y aunque suena lógico aplicarlo justo en ese momento, en realidad ese mal timing puede dejar la piel totalmente desprotegida, como si no hubieras hecho nada. Literal, como si te lo hubieras saltado.
Te puede interesar:
- Una moneda del Bicentenario de la Independencia podría ser un tesoro: la venden en casi 5 MILLONES
- Esta moneda mexicana de 50 centavos es una joya para los expertos en numismática
- Las 5 monedas mexicanas antiguas que siguen aumentando su valor: hoy son oro
¿Por qué el bloqueador solar no sirve de mucho si se aplica justo antes de salir?
Porque el protector solar no actúa al instante. Necesita unos minutos para activarse y formar la barrera que realmente protege. Según dermatólogas y expertos en cuidado de la piel como Eza Mtnz, lo ideal es ponerlo entre 15 y 20 minutos antes de salir, cuando la piel todavía está fresca y sin sudor.
Aplicarlo corriendo, ya bajo el sol o en la banqueta, es como salir sin nada. Hay un lapso donde la piel sigue estando 100% expuesta y, si a eso se le suma que la mayoría usa poquita cantidad o se salta zonas clave, el resultado es: quemaduras, manchas o simplemente ningún beneficio.

¿Y qué pasa si el bloqueador solo se usa cuando hay sol?
Otra trampa común. Muchas personas creen que el bloqueador es solo para vacaciones, playa o días con solazo, pero no: los rayos UV también están presentes en días nublados o incluso adentro, si hay ventanas cerca. Y aunque no se vea el sol, la radiación sigue haciendo de las suyas.
Eso explica por qué a veces aparecen manchas o líneas finas sin saber por qué. No se trata solo de usarlo “cuando toca”, sino de integrarlo a la rutina diaria, como lavarse la cara o cepillarse los dientes. Cosa de hábito.
Entonces, ¿cuál es la forma correcta de usarlo?
No es tan complicado, solo es cosa de hacerlo bien y seguido. Lo ideal es aplicarlo en casa, con calma, mínimo 15 minutos antes de salir.
Y sí, hay que reaplicarlo cada 2 o 3 horas si hay sol directo, se está al aire libre o se suda. También importa cuánto se usa (una cucharadita para rostro y cuello es lo recomendado).
Ah, y no olvidar las zonas que todo el mundo ignora: orejas, párpados, escote, nuca, manos… porque sí, ahí también pega el sol y ahí también salen manchas (y arrugas).