Angustia, hambre y frío; el calvario que viven familiares de pacientes del Hospital General de Actopan, Hidalgo
Familiares de pacientes en el Hospital General de Actopan, Hidalgo, enfrentan frío, hambre y condiciones precarias mientras esperan noticias de sus seres queridos.
La gente que viene de lejos no tiene para comer, no tiene para ir a un lugar donde quedarse y se tiene que quedar en la banqueta; las imágenes conmovieron. Es un padre con su hijo recostado en la silla de un nosocomio, que, según testimonios, esperaba informes de su familiar; pedían apoyo porque no tenían que comer, ni dónde dormir. Las imágenes son del Hospital General de Actopan, Hidalgo, de la sala de espera, donde las historias del calvario que enfrentan los familiares de pacientes enfermos se repiten todos los días.
Sufren un infierno pacientes de familiares internados en el Hospital General de Actopan, Hidalgo
“Tengo un enfermo aquí, ya llevo dos días. La mera verdad es un infierno estar aquí, no se lo deseo a nadie”, explicó Edén, uno de los familiares de pacientes internados en este hospital, que han tenido que adaptarse. Comer como puede y dormir en la calle, pues proviene de una comunidad en el municipio de San Salvador.
“En un rinconcito donde caiga, pues nos quedamos. Ahí buscamos dónde quedarnos y pasamos frío, esperarnos por nuestro paciente”, añadió Edén Reyes Vázquez
Al interior del hospital hay una sala de espera, un techo es lo único que los cubre del clima, pero en cuanto oscurece, ellos deben salir y esperar en las calles.
Las familias de pacientes internados en el Hospital General de Actopan, #Hidalgo, viven con la angustia de la espera.
— Fuerza Informativa Azteca (@AztecaNoticias) May 8, 2025
A esto se suma el frío y el hambre, haciendo que la espera se convierta en una verdadera tortura.@herreleo con la información en #HechosMeridiano pic.twitter.com/MhISbHXj5A
Por las noches la situación se complica para quienes están a la espera de informes de sus familiares, porque esta área con la techumbre donde se protegen es cerrada, las sillas ya no sirven para sentarse ni para dormir, así que tendrá que buscar un espacio en la banqueta donde sentarse o bien, en los vehículos donde viajaron, sobre todo aquellos que vienen de localidades apartadas.
“Ya como a las 10 lo cierran y tenemos que salirnos”, añadió Edén.
Incluso los comerciantes han sido testigos de cientos de historias y ellos han brindado alimento.
“Me han dicho, pues quisiera comprar, pero no traigo dinero, mejor lo guardo para el medicamento”, detalló la comerciante Margarita Evaristo.
Justo a un costado de este hospital, refieren que había un albergue, mismo que ahora es el área rosa, de atención a mujeres embarazadas.
“Supuestamente, aquí hicieron esto para los que vienen de lejos, de ahí ya nos quitaron”, explicó la comerciante Isabel.
Hasta esta hora, las autoridades responsables de la operación de este hospital, no han dado respuesta a nuestra consulta de información, sobre las razones del cierre del albergue y lo que padecen enfermos y sus familiares.